La autentica familia ganadera de Venezuela, integrada por la Federación Venezolana de Ganaderos de Venezuela (Fedenaga), entre el 19 y el 21 de mayo se celebró la LI Asamblea Anual Ordinaria, en la Asociación de Ganaderos Alberto Adriani (Asodegaa).
Sus anfitriones: el presidente, Luis O Linarez R.; su vicepresidente, Jóvito Abdón Paredes G.; y demás miembros de la junta directiva, demostraron sus dotes de buenos anfitriones en la asamblea llevada a cabo en la pujante población de El Vigía, zona productiva de diferentes rubros de alimentos de la dieta diaria de la población, quienes llueve, truene o relampaguee, y sobre todo los obstáculos y atropellos que han sufrido por la inclemencia de los enemigos bien conocidos por todos los de la producción nacional, siguen produciendo.
El punto de honor de esta familia ganadera es producir y hacer aportes al estado, ser parte de la solución y no de obstáculos e inconvenientes y trabas puestas e impuestas por quienes en vez de patearlos deberían aplaudirlos, en vez de atropellarlos presentarles soluciones a sus derechos adquiridos con dignidad y vocación de servicio, haciendo un trabajo arduo, sorteando los riesgos y temporales en los que cada día se aferran más en atropellar de una forma u otra al noble productor del campo, quienes con orgullo lucen las manos encallecidas, su piel curtida por el sol y sus botas llenas de barro.
Con todas estas penurias expuestas la familia ganadera de Fedenaga, jamás desmayará con la gran voluntad de un hombre de honor y principios como debe ser. Ellos admiran la paz y rechazan el conflicto y la violencia. Uno de sus eslogan sin temor a equivocarme es seguir produciendo en nombre de Dios, sin importar que sea para alimentar a quienes quieren destruirnos y desaparecernos. Dios premia a quien trabaja y el cielo apoya a quien se deja apoyar. Todo productor del campo después de que conoce a Dios, no debe temer a nadie.
A los integrantes o delegados de esta Asamblea, da la impresión y estoy seguro de eso, que los acompaña el optimismo con los bríos renovados como un potro cerrero; no tienen tiempo para pensar en la derrota y dejar de producir. Hay mucho sentimiento y voluntad en el trabajador del campo. Es casi imposible soportar el olor a tierra húmeda en los primeros inviernos, así como el relinchar de un caballo, el canto y el revoleteo de los pájaros, el parir de las vacas, el grito madrugador del campesino que es como el toque de Diana que invita al trabajo ennoblecedor, que no permite pensar en zanganerías ni llevar una vida fácil, así como los ruidos de las ruedas del tractor si es que se consigue, si no es que está accidentado o sin repuestos.
Admiro mucho la voluntad de la familia ganadera. Ellos piensan en la prosperidad y jamás en la derrota y en su mente no tiene cabida actuar como los músicos del Titanic que se estaban hundiendo y aun continuaban tocando, no señor, confío en que estamos pasando ya el río crecido y tormentoso y no se pueden doblegar después que casi están pasando el temporal como tampoco cambiar de caballo casi llegando a la orilla.
Son hombres y mujeres de adelante con criterios firmes e ideas propias, mantengan la mirada hacia adelante apuntando al futuro. No debemos dejar de hacer nuestro trabajo con orgullo y amor, el amor es una fuerza a favor del bien y quien está produciendo alimento sin duda está dentro de estos lineamientos, así que a la familia ganadera les insto a seguir luchando cada día más unidos y mis buenos deseos de que nuestro esfuerzo pronto de fruto en positivo y dejemos de ser la Diana de los Deshacedores, mucha suerte al señor Presidente: Carlos Odoardo Albornoz y a la junta directiva donde me incluyo como director vitalicio con voz y voto. Mi deseo es aportar esfuerzos con toda la voluntad de un gremialasta a tiempo completo, asumiendo por igual las mismas responsabilidades con dignidad y orgullo.
Unidos todos por el Sistema de Riego Yacambú y el Ferrocarril de la Región…
@JGMendozabarqto