Puedo dar fe por mis recorridos permanentes en zonas etiquetadas como rojas, que ya la gente no come cuento con amenazas y desea participar masivamente para refrendar su vocación de libertad
En la víspera de una campaña electoral para las elecciones parlamentarias nacionales, considero conveniente destacar en esta asignación escrita, cuáles son las etapas de una campaña electoral, aclarando que no necesariamente las mismas deben ir en sucesión de la otra si no que pueden ejecutarse o presentarse simultáneamente a los fines de ir cumpliendo con los objetivos que se han trazado en la planificación estratégica.
Fase de presentación
En este momento inicial de la campaña, preferiblemente luego de haber aplicado varios estudios de opinión pública, tales como encuestas y grupos focales donde se conozca el nivel de reconocimiento del candidato y cuál es su perfil ideal ante los electores, es deber de un comando de campaña presentar a través de los medios mas adecuados la mejor hoja de vida de su aspirante donde por supuesto se destaquen sus fortalezas y se minimicen sus debilidades. Tal como su nombre lo indica la primera entrada a consideración del electorado debe hacerse con mucha maestría a los fines de dar la impresión mas idónea que capte la atención. Estudie bien el momento, los canales de divulgación, las mejores fotos e imágenes para arrancar la campaña, pero sobre todo tenga en cuenta que lo que quiera mostrar debe tener un guión especial que identifique sinceramente al candidato y lo muestre consonante con lo deseado. Arrancar tarde puede ser un pecado, pero adelantarse irracionalmente lo puede ser también, por eso estudie bien los tiempos para no desfasar. Haga el esfuerzo de mantener la misma imagen si le es favorable con buenas tomas para la Tv y con fotos uniformes en afiches y materiales propagandísticos. Tenga claro responder magistralmente porque quiere ser parlamentario.
Fase de propuestas
Luego de evaluar con instrumentos científicos que su etapa de reconocimiento está cumplida a cabalidad, en vista de que la mayoría del electorado sabe quién es el candidato y percibe claramente los atributos y características que se quieren destacar, viene el siguiente paso donde un candidato orientado por diversas técnicas de investigación que le permitieron consultar a los ciudadanos y expertos, sabe qué propuestas debe hacer para captar en primer orden su atención, su actitud favorable y, por supuesto, luego su conducta expresada en el voto.
Muchos comunicadores y curiosos preguntan en la etapa de inicio de campaña cuáles son sus propuestas. Un buen candidato aun cuando tenga idea de las mismas debe en primer orden asomar líneas gruesas basados en ejes de los problemas que expresan los ciudadanos y luego con mucho respeto decir sin pena: “Estamos en la etapa de consultar a expertos y electores en general por diversas vías acerca de los problemas de los cuales ellos quieren que nos ocupemos prioritariamente”; y por supuesto clarificarles que en su debida oportunidad se plantearan con detalles las respuestas guiadas por los isues o temas de interés para la colectividad ajustadas a la entidad federal o a la circunscripción. Un potencial legislador honesto, aclara que el no le corresponde hacer una vía rural o abastecer el Mercal; pero debe indicar que ese tipo de obras o programas contaran con su voto favorable para que se incluyan en el presupuesto nacional. Igual debe apuntar que él no es responsable de hacer un acueducto rural o comprar patrullas para combatir la inseguridad; no obstante que tiene el deber con su poder contralor de vigilar para que estos se construyan y se compren de forma, efectiva, eficiente, eficaz y transparente. Concéntrese en pocas propuestas y demuestre que tiene capacidad para asumirlas, “el que mucho abarca poco aprieta”
Fase de ataque y defensa
Aunque no soy partidario de asumir ataques contra adversarios, muchas veces es necesario asumir una defensa con un ataque certero, en vista de que muchos comandos de campaña o aspirantes mismos realizan señalamientos muy negros para esconder debilidades que ellos poseen a los fines de trasladar la pelota a tu campo. Fijese bien a quien le responde o sobre que responder, mucho candidato cuando responde engrandece al rival por que lo coloca como un verdadero retador de importancia, estudie bien a su oponente, lo que dice y por supuesto por donde lo dice, si no está rankeado con ud ignórelo, si el tema es banal “hágase el musiu” como decimos en Venezuela y si lo dice en un medio de poca importancia no lo sobredimensione respondiéndole por un canal de gran audiencia. Por lo general el mejor ataque son sus propuestas con el tema central de la campaña, tenga cuidado con distraerse en peleas estériles,este país anda buscando políticos conciliadores, carismáticos e innovadores. El comando de campaña con sus asesores y el candidato debe tener claro también quien responde o quien ataca de ser necesario asumir esta posición. De la misma forma deben determinar si las espadas o escudos se colocan de frente o perifericamente. Entrénese como vocero calificado y entrene un equipo que pueda asumir este rol si es pertinente.
Fase de petición del voto
Posteriormente a que tiene un aspirante bien divulgada su hoja de vida, sus propuestas, y está blindado ante los ataques surge un momentum cumbre, la petición del voto a los electores que ya reconocen al candidato, lo aceptan e inclusive le brindan su confianza. Trate de no alterar esta fase para que tal como un buen novio debe saber con exactitud cuando pide matrimonio, así debe conocerse cuando es clave solicitar el voto a unos electores cautelosos y cansados de la polarización y las falsas promesas, pedirlo antes de tiempo puede hacer huir al que tiene ganas, cuidado con el afán.
Fase de sistematización electoral
En comicios pasados los partidos venezolanos tenían la mala costumbre de casi dejar el 100% de esta etapa del proceso electoral para ultima hora, aun cuando sabemos que todavía persisten las carreras para postular los candidatos, organizar la logística, el traslado de potenciales electores, las bases de datos y conseguir los testigos electorales, esto ha mejorado mucho porque simultáneamente a las etapas anteriores muchos activistas y colaboradores ya se van informando y preparando en el rol principalmente de la defensa del voto, sobre todo en el el ala opositora debido a que la confianza en el arbitro electoral ha venido en picada. Sistemáticamente el Estado venezolano ha infundido miedo a los ciudadanos opositores para que no formen parte voluntaria de estos procesos tan normales en el pasado democrático, tenemos como ejemplo la lista del extinto Tascón y otras bases de datos usadas mal intencionadamente para la exclusión; sin embargo puedo dar fe por mis recorridos permanentes en zonas etiquetadas como rojas, que ya la gente no come cuento con esas amenazas y desea participar masivamente para refrendar su vocación de libertad.
Finalmente viene el día “0” de la elección cuando los candidatos y comandos con sus salas de evaluación y control deben garantizar que sus seguidores acudan a las urnas, allí los más organizados tendrán ventaja, son necesarios los recursos como alimentos, movilización y la llamada “satélite”. El triunfalismo es muy mal consejero, pero el pesimismo puede ahuyentar, nada está escrito. Estamos seguros de que el triunfo será de los que no se rindan ante las adversidades. ¡Amanecerá y veremos!