Hace 2015 años existió un hombre, que creó un slogan que decía amaos los unos a los otros, inventó un símbolo: la cruz y creó una gran fotografía de su vida que le ha dado la vuelta al mundo como es la última cena. Ese hombre considerado el más influyente de todos los tiempos tenía su propia historia y con ella cambió el mundo. Apenas empezó con doce seguidores (discípulos) y hoy tiene 6 mil millones de seguidores.
Ese análisis de Jesucristo lo hace Irrael Gómez, ponente de la conferencia Follow Me, organizada por la empresa DaniTrend y EL IMPULSO que se realizó la noche del miércoles en la sala alternativa de este rotativo.
Gómez habla de Cristo, porque a través de su experiencia con su cuenta @esen_serio, y su agencia StreetMarketing se convenció de que la mejor manera de vender publicidad y seducir seguidores en las redes sociales es contando historias que conecten emociones.
Jesús además de tener todos los elementos ya antes mencionados también tenía un manual de cómo actuar, la Biblia, y todo le salió perfecto.
El experto en redes la considera la vida de Jesús mejor campaña de la historia. Y es que Gómez sostiene que al abrir una cuenta a través de la redes sociales ya sea para vender, informar o trasmitir un ideal se debe contar con un buen eslogan y cada día escribir una buena historia que cautive a la gente y en medio de éstas vender o multiplicar tus seguidores. Es decir, crear comunidades en red.
Para esto Gómez dice que hay que buscar internamente y descubrir que es lo que te hace diferente de los demás, como Cristo, que cuando fue golpeado no se defendió sino que puso su otra mejilla, nadie antes lo había hecho.
“La idea de captar es contar o vender historias, no se trata de colocar una imagen con un comentario vago, sino acompañar esa imagen potente de una historia humana que cree una conexión especial con tus seguidores porque les vendes una necesidad o se la creas y eso engancha. Debemos ser creativos y diferentes”.
Gómez recuerda la experiencia del fisiculturista Jhon Lugo, quien quería ganar seguidores y acudió a su empresa StreetMarketing. Para lograr la meta le preguntaron qué lo hacía diferente al resto de sus colegas. Luego de conocerlo mejor a través de innumerables preguntas (briefing) se dieron cuenta de que cocinaba excelente !bingo! tenían a un hombre musculoso que se dedicaba a un oficio rudo, pero que al llegar a la casa preparaba cenas como la mejor de las amas de casas. A partir de allí contaron una historia que sedujo al público en las redes y Lugo duplicó sus ventas.
Irrael no está solo en su creativa labor en StreetMarketing, también lo acompañan Jack Garzón que se encarga de fijar las estrategias para sus clientes, Ángela Blone que crea y pule la imagen de los clientes, y Agustín Yler quien fija los objetivos del cliente. Ellos hablaron cada uno de su especialidad en la conferencia y dieron las recomendaciones más convenientes a quienes quieran ser exitosos en las redes.
Pero Irrael Gómez no deja de preguntarse cada día cuántos seguidores tuviera Cristo si hubiese usado las redes sociales para transmitir su mensaje.