La presidenta de la Fundación del Niño de Iribarren, Carmen de Ramos, se ocupó directamente del caso de Mariana Rodríguez, una niña de seis años con problemas visuales, a quien le brindó atención oftalmológica y donó los lentes correctivos.
La pequeña es gemela, pero sólo ella padece astigmatismo y estrabismo. A pesar de que es muy buena estudiante, se le dificultaba leer y realizar otras actividades propias de su edad. Su madre, Ana María Villalba, no contaba con el dinero para costear una cita médica y decidió acudir a la fundación.
“Desde que vine la primera vez me trataron muy bien, los trabajadores sociales se pusieron en mi lugar e hicieron todo lo posible para solucionar la situación de mi hija, por eso estoy tan agradecida con la primera dama y su equipo”, contó Villalba.
Pediatras y oftalmólogos la examinaron y acordaron que necesitaba lentes. La madre no tenía cómo comprarlos, y la institución se los donó mediante el programa “Una ayuda para sobrevivir y prosperar”.
A partir de hoy la vida de Mariannita no será la misma.