Lewis Hamilton (Mercedes) logró el mejor tiempo de las dos primeras sesiones de entrenamientos del Gran Premio de Mónaco de Fórmula 1, este jueves en las calles del Principado, en una jornada marcada por la lluvia y en la que Nico Rosberg pudo haber escondido sus armas.
En espera de la crucial clasificación del sábado, los dos pilotos de las Flechas de Plata optaron por evitar la confrontación directa en una jornada en la que la segunda sesión se suspendió antes del final por un aguacero.
El día se inició con una confirmación. Hamilton, que acaba de firmar su ampliación con Mercedes hasta 2018 por una montaña de millones y que ha ganado tres carreras de las cinco disputadas, está preparado para la batalla en las calles del Principado.
Con un mejor crono de 1 minuto, 18 segundos y 750 milésimas -neumáticos Pirelli blandos-; aventajó en 149 milésimas al benjamin del ‘paddock’ Max Verstappen, el prodigio de 17 años de Toro Rosso.
Era sólo la primera sesión y el holandés, calificado como un «talento excepcional» por Alain Prost, tuvo tiempo de mostrar su calidad en la primera vez que rodaba en las calles de Mónaco. No lo había hecho ni fuera de las carreras, ya que carece de permiso de conducir debido a su edad.
El otro Mercedes, conducido por Rosberg, sufrió un pequeño golpe al inicio de la sesión, sin gravedad, pero quedó muy lejos de los primeros puestos. Fue noveno a más de un segundo de su compañero, habiendo completado casi las mismas vueltas (47 frente a 49), como si ocultara sus cartas en una partida de póquer.
