Una vez más, el vandalismo hizo de las suyas. En esta ocasión la fuente El Bombero, ubicada en la avenida Bicentenaria, al este de la ciudad, fue objeto del hurto de todas las bombas y el tablero de control, sumándose a la ola de despojos registrada durante los últimos meses en los espacios públicos de la ciudad.
La Empresa Municipal de Infraestructura y Conservación del Ambiente (Emica) estima que el costo de todos los equipos sustraídos asciende a más de 600.000 bolívares, inversión que, aunada a la inflación y escasez de este tipo de aparatos en el país, dificultará su reposición en el corto y mediano plazo.
“El alcalde Alfredo Ramos está realizando esfuerzos constantes para ofrecer espacios públicos atractivos. Repudiamos estos hechos vandálicos que afectan no solamente al patrimonio de la ciudad, sino a sus habitantes”, aseguró la gerente de Ambiente de Emica, ingeniero Zuleima Cordero.
Durante los primeros 16 meses de gestión, las fuentes y sistemas de riego han sido víctimas de constantes hurtos, entre ellas la Bolivariana, Los Libertadores, Musical, Paseo Juan Guillermo Iribarren, Los Bomberos, Cardenalito del Este y del Oeste, así como la plaza Bolívar, registrándose robo de cableado exterior, bombas, flotantes y lámparas.