En Venezuela observamos con mucha preocupación la escalada en los precios de los alimentos y productos de primera necesidad, además de la escasez y desabastecimientos de rubros claves para las familias, lo que debe generar una reflexión profunda por parte de quienes tienen la responsabilidad de dirigir el país.
Así lo expresa el gobernador progresista de Lara, Henri Falcón, quien asevera que con el pasar del tiempo los problemas tienden a agudizarse y nadie puede jugar al fracaso nacional.
Por ello insiste en la necesidad de frenar el sectarismo y las amenazas y en su lugar, activar de inmediato el diálogo productivo por Venezuela, convocando a los empresarios, al sector productivo comprometido con el país, independientemente de su color político, porque en este momento de crisis –resalta- lo que importa es la nación y no los intereses partidistas o sectoriales.
“Para superar la crisis económica hay que trabajar en conjunto con el sector empresarial. Es preferible la concertación con los empresarios a la profundización de los problemas”.
Henri Falcón asegura que el pueblo reclama soluciones concretas. “Todos los días estamos metidos en los barrios, en los campos, en los caseríos, a nosotros no nos van a echar cuentos, y allí en los sectores populares, la gente pide que se acaben las peleas, la retórica política, las amenazas y el sectarismo”.
El dirigente progresista cree que el país tiene todas las potencialidades para salir adelante, lo que falta es voluntad para tomar decisiones y abrir canales de diálogo con todos los sectores. “No se puede seguir privilegiando la agenda de la confrontación y de la polarización, porque afecta a la mayoría”.
Para enfrentar la crisis económica hay que cambiar el radicalismo por la concertación con el sector productivo, reitera.
Medidas aisladas generan decepción
“Es preocupante que el gobierno nacional no busque un entendimiento con los empresarios para lograr soluciones contundentes a través del diálogo productivo a los diversos problemas económicos que agobian al ciudadano. Observamos todo lo contrario, el ejecutivo nacional ha sido extremista contra los productores nacionales, así no se genera la confianza para atraer nuevas inversiones al país; esa política se debe rectificar, tenemos que entendernos por Venezuela y no es con la confrontación que se logrará resolver los problemas prioritarios como la inflación, el alto costo de la vida, la devaluación de la moneda, la escasez, el desabastecimiento y la baja productividad nacional”.
Opina que es urgente la concertación para generar un plan de crecimiento económico con la participación de todos los sectores.
“El gobierno nacional no puede seguir tomando medidas económicas aisladas, que a la final no resuelven los problemas y generan una mayor decepción. El pueblo está perdiendo la esperanza y eso es peligroso”.
En la calle se percibe un malestar social que se manifiesta en los rincones del país producto del desabastecimiento, la especulación y la inflación. “Es la hora de reflexionar y rectificar para evitar escenarios de violencia que nosotros no deseamos ni promovemos”.
Tiempo de oportunidades
A pesar de las adversidades y las dificultades, Henri Falcón sostiene que son tiempos de oportunidades. Las elecciones parlamentarias representan un camino constitucional para alcanzar el equilibrio democrático desde la Asamblea Nacional. Lograr la mayoría a favor del cambio democrático es una obligación para las fuerzas unitarias del país. Eso permitiría iniciar la reinstitucionalización y colocar los poderes públicos al servicio de Venezuela y no de alguna parcialidad política.
“Nuestro pueblo debe ser sabio y paciente, castigar la ineficiencia a través del voto masivo. Quien sienta rabia debe canalizarla a través de la votación y el derecho constitucional a las protestas pacíficas. Es el momento de organizarnos y de tomar la calle en positivo para sumar, orientar, convencer y construir una mayoría que garantice el triunfo en las parlamentarias”.