Ediles de la Mesa de la Unidad Democrática, (MUD), acompañados por las comunidades, acudieron a la Defensoría del Pueblo del estado Lara para solicitar una investigación al presidente del Concejo Municipal de Iribarren, Alejandro Natera, por la reiterada suspensión de las sesiones, que afecta debates y decisiones en materia de interés local.
Esta situación atenta contra los derechos constitucionales de los habitantes de las comunidades y menoscaba la eficiencia en la utilización de los recursos públicos, señaló el concejal de la MUD, Joel Mendoza.
Agregó que de 120 sesiones al año, sólo en este primer trimestre, se han efectuado 24, a causa de la ausencia del presidente de la cámara, a pesar de que el artículo 36 del Reglamento Interior y de Debates del Concejo Municipal prevé que ante su inasistencia se puede celebrar la sesión con el primer vicepresidente.
Milagro Gómez de Blavia, concejala por la MUD, aseguró que no sesionar e incumplir con estas reuniones son síntomas de que el poder legislativo local no trabaja.