(…) El estado Lara dispone del talento necesario para emprender acciones concretas y lograr la culminación de una obra de magna ingeniería como lo es la Represa Yacambú. Tan sólo ha hecho falta la elección de actuar en pro de la preservación de la vida en la región que ha dado tanto para el desarrollo de la nación.
El ejemplo lo podemos tomar del trabajo literario “El Poder de Uno.” Allí, el autor hace referencia a que el río más grande del mundo, el Nilo, comienza con una gota de agua. En el estado Lara hacen vida activa suficientes ingenieros especializados en hidráulica, agrónomos, geólogos, ecologistas, biólogos; todos con reconocida ejecutoria profesional. Ellos tienen el sagrado deber de demostrar a las autoridades gubernamentales, la imperiosa necesidad, que se vive en la región, sobre la culminación de esta obra. De no ser Yacambú, ¿cuál es la alternativa que existe ante el presunto agotamiento de la vida útil del embalse conocido como Dos Cerritos?
Más allá de la culminación de Yacambú, está la preservación de los acuíferos destinados a suministrar el agua al embalse que describo como un tobo de 352 Km2 de superficie. Para tal efecto podría contarse con el agua de lluvia, pero la tala y la quema efectuada desde las nacientes mismas del río Yacambú, y en toda su zona protectora, hace suponer que la vida útil de la represa estará reducida en un porcentaje por demás significativo, todo como consecuencia de la sedimentación y la escorrentía de los suelos desprovistos de su milenaria protección.
He advertido sobre este problema desde hace más de veinte (20) años. He llegado incluso a sobrevolar la zona en helicópteros de la Guardia Nacional, a instancias de funcionarios del extinto Ministerio del Ambiente, y desde entonces se ha comprobado la depredación que ha existido en la zona y que, ha venido creciendo ante la supuesta indiferencia de las autoridades a quienes compete hacer valer 3 artículos de la Constitución Nacional y alrededor de 7 leyes y reglamentos que emanan de nuestra Carta Magna.
El sur del estado Lara está conformado por un escudo biológico natural denominado “Sierra de Portuguesa,” que aunado a zonas aledañas producen el agua dulce que tiene influencia directa sobre 3 grandes cuencas hidrográficas, a saber: La Orinoquía (Que forma parte de la Amazonía), la Cuenca del Mar Caribe y la Cuenca del Lago de Maracaibo. Estas zonas, forman parte de Parques Nacionales y áreas de protección especial A.B.R.A.E.s, supuestamente protegidas por el Estamento Jurídico venezolano. He aquí una demostración más de la necesidad del Imperio de la Seguridad Jurídica, a través de la implementación de la Justicia Honesta, en el país que, en esta materia, fue ejemplo para el mundo. Existen suficientes estudios, proyectos, propuestas, y se han realizados muchos trabajos de excelente calidad profesional, sobre la necesidad de preservar estas zonas y de cómo solventar la problemática; no me atrevo a citar nombres por temor a obviar a alguien cuya trayectoria de lucha por la defensa de la vida ha tallado su nombre en el acervo histórico, regional y nacional; el llamado es a consolidar esfuerzos y así comenzar con la ardua tarea de lograr la culminación de la Represa Yacambú, de emprender nuevos proyectos pero, sobre todo, de parar la depredación de las zonas productoras de oxígeno y de agua dulce, por ser patrimonio de la humanidad.
Es nuestro deber lograr la culminación de YACAMBÚ.