Escúchame, atiéndeme, ayúdame estas son palabras que escucho y leo constantemente de mis seguidores. Es que todos los larenses, y de seguro todos los venezolanos, demuestran una necesidad muy grande de ser escuchados, atendidos, asistidos por sus gobernantes.
A pesar de que tenemos un gobierno nacional socialista, que se supone atiende al pueblo, y un gobierno local progresista, que también se ufana de su servicio a las comunidades, cuando salgo a la calle a trabajar se siente la imperiosa necesidad de la gente de ser escuchada, de ser atendida en un mar de problemas comunitarios.
» Ya no encuentro a quién pedir ayuda» me dijo un señor en Bararida que está cansado de la inseguridad. En Fundalara también sentí desesperación de las personas por no ver una pronta solución al abandono de la plaza Federico Carmona y a la inseguridad.
Los gobernantes fueron elegidos para ofrecer soluciones, para buscar el desarrollo de los pueblos. No solo para hacer política.
La política es la que marca la agenda de las autoridades de este país mientras el pueblo se ahoga en penas. Gobernador y alcaldes de los 9 municipios de mi querido estado Lara no se olviden del pueblo que los eligió. No se olviden que su deber es mejorar la calidad de vida de los larenses en cuanto a seguridad, vialidad, servicios, cultura, educación y deportes.
Escuchar las necesidades de las comunidades les ayudará a tener una gestión exitosa y recordada. La mejor manera de hacer política es atender efectivamente a la comunidad.