La controversia en la Policía Municipal de Iribarren (PMI), sigue. Desde la supuesta presión a Marisol Vargas para que renunciara a su cargo como directora, se ha desatado una serie de rumores.
Al parecer, el pasado martes cuando se realizó una requisa en la que los privados de libertad iniciaron una reyerta para no entregar sus armas blancas, fue porque un grupo de supervisores los habrían auspiciado a cometer tales acciones.
Aparentemente, este grupo de funcionarios, no estaban de acuerdo con las líneas de mando de Vargas, y como supuestamente, el alcalde Alfredo Ramos le había dado 30 días a la exdirectora para resolver la problemática, los uniformados buscaron la manera para que el burgomaestre tomara la decisión de retirarla del cargo.
Extraoficialmente se conoció que Ramos sostuvo una reunión con los oficiales quienes le plantearon la posibilidad de que sea uno de ellos quien tome las riendas de la PMI, como lo establece la ley, pero él se habría dado cuenta de la lucha de poder dentro del ente policial, por lo que enviaría al abogado Charlie Virguez a tomar el cargo dejado por Marisol Vargas.
Según la ley, serían Víctor Coronel o Felippo Palmieri, quienes son los de mayor jerarquía.
El reglamento también establecer que su puede ir a un concurso, en el que Ramos podrá proponer a alguien, pero sería Visipol quien escoja al nuevo director.
