El gobierno español convocó el miércoles al embajador de Venezuela en Madrid para manifestar su rechazo a las críticas del presidente Nicolás Maduro tras la moción del Parlamento ibérico en apoyo de los opositores encarcelados.
«El gobierno considera intolerables las últimas declaraciones, insultos y amenazas proferidas por el presidente Maduro contra España», dijo el Ministerio de Exteriores en un comunicado.
Maduro llamó «racista» a su homólogo Mariano Rajoy y atacó duramente la iniciativa aprobada el martes por el Parlamento español a favor de la liberación de Leopoldo López y otros opositores venezolanos.
El director para Iberoamérica, Pablo Gómez de Olea, trasladó al embajador Mario Isea que «este tipo de declaraciones e insultos no contribuyen a un mínimo entendimiento entre dos gobiernos que representan a dos pueblos unidos históricamente por estrechos lazos».
«Las autoridades españolas han sido y serán siempre respetuosas de la dignidad de las personas que ocupan cargos de gobierno en Venezuela», añadió la cancillería en su nota.
Maduro dijo que anunciará un conjunto de medidas en respuesta a la supuesta agresión de España en las próximas horas.
El mandatario venezolano llamó a consultas a su embajador en Madrid en octubre y anunció una revisión completa de sus relaciones con el país europeo.
Desde entonces, los políticos españoles han aumentado sus mensajes de apoyo a López, Antonio Ledezma y otros opositores venezolanos en prisión. El expresidente socialista español Felipe González se sumó recientemente al equipo de abogados que defiende a López y Ledezma.
Por su parte el presidente Rajoy se ha entrevistado en Madrid con Mitzy Capriles, esposa de Ledezma, y Lilian Tintori, esposa de López.
Las relaciones entre España y Venezuela han pasado por muchos altibajos en los últimos 16 años, pero en general se mantuvieron estables en el plano económico.