El presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, expresó este lunes su deseo de que los opositores venezolanos Leopoldo López y Antonio Ledezma salgan de la cárcel, en una entrevista con la radio pública española.
«Yo he recibido aquí a las mujeres de dos personas que están en la cárcel sin que haya ningún motivo para que estas personas estén en la cárcel», afirmó.
Rajoy recibió el 13 de marzo a Mitzy Capriles, esposa del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, y antes, el 22 de octubre de 2014, se había entrevistado con Lilian Tintori, la mujer de Leopoldo López.
«A mí me gustaría que esas personas no estuvieran en la cárcel porque considero que no han hecho nada para que estén así», añadió el jefe del ejecutivo español.
«Esas personas tienen el pleno apoyo, además creo que en esto pensamos igual la inmensa mayoría de las fuerzas políticas españolas, tienen el pleno apoyo de las personas normales, oiga, estamos en el siglo XXI y en el siglo XXI lo que queremos es regímenes de democracia, de libertad y de derechos humanos», dijo Rajoy, cuya reunión con Tintori suscitó una airada respuesta de Caracas.
El gobierno de Nicolás Maduro llamó a consultas a su embajador en Madrid acusando al jefe del ejecutivo español de haber llevado a cabo una entrevista «injerencista, irresponsable e irrespetuosa».
El alcalde de Caracas, Antonio Ledezma, fue detenido el 19 de febrero pasado por los servicios de inteligencia venezolanos y enviado a «prisión provisional» por presuntos delitos de conspiración.
Ledezma se encuentra en la cárcel de Ramo Verde, a unos 30 km de Caracas, junto a Leopoldo López, que se entregó voluntariamente el 18 de febrero de 2014.
López está acusado de incitar a la violencia en las masivas protestas de principios de 2014 contra el gobierno de Maduro, que dejaron 43 muertos.
«Me gustaría que las cosas fueran bien en Venezuela», dijo Rajoy. «Quiero tener buenas relaciones» con Caracas, insistió.
«Tienen una situación económica que no es la mejor, ojalá vaya bien porque es una nación hermana y amiga desde hace muchísimo tiempo, porque los lazos afectivos y personales son de todo tipo», añadió.
El jefe del gobierno español recordó la emigración española al país sudamericano afirmando: «yo tengo familia que ha nacido en Caracas y me gustaría que las cosas fueran bien, pero en el siglo XXI, los comportamientos tienen que ajustarse a lo que son las normas clásicas de una democracia».
