Resulta lamentable decirlo, pero hay muchos maestros no leen, no adquieren un libro no sólo porque es costoso y no tienen cómo hacerlo, sino que no saben leer, ¿Cómo enseñan lo que no saben? y además, los que saben no tienen el hábito de la lectura, porque, podrían pedirlo prestado en una biblioteca y no lo hacen. Tampoco investigan, aunque sean magister. Por allí deberían arrancar la consulta educativa o investigación para saber en qué estado se encuentra la educación.
Es grave el asunto, ¿en manos de quien están nuestros hijos? Algunos dirán:- es que casi todos los docentes tienen postgrados, ¿cómo van a estar mal preparados? Pues, los postgrados no garantizan preparación, la evaluación allí es más light y muchos pasan sólo con su presencia o copiando y pegando información de Internet, porque sus profesores tampoco tienen compromiso, ética.
En Educación Inicial los niños se forman a punta de colores y páginas con dibujos de fotocopia. No desarrollan su pensamiento, porque no tienen una profesora que rete su inteligencia, que los ayude a alcanzar el desarrollo potencial que dice Vygotsky. Ellos entran como diamantes y los transforman en carbones. En primaria, los famosos proyectos no son más que una fiesta colectiva donde los padres y representantes gastan dinero para hacer maquetas, trípticos, identificaciones y comida para que su hijo recite un pedazo de información que no vale nada, que no forma nada más que su memoria. Si el director revisara los proyectos de esos profesores se daría cuenta que son los mismos de cada año, lo cual indica que el tema que debería servir de motivación para que los estudiantes construyan competencias, son seleccionados por los docentes y repetidos a conveniencia.
Por otra parte, los jóvenes de bachillerato con el sistema de evaluación actual que permite repetir los exámenes hasta que todos hayan aprobado, le dan una excusa al docente para hacer evaluaciones como talleres, donde todos aprueben a la primera, para así, no repetir pruebas. Entonces, los estudiantes pasarán sin adquirir ninguna competencia y llegarán crudos a la universidad donde, si el profesor tiene ética y preparación, exigirá lo que no han exigido los demás en toda su escolaridad. Por esa razón, se debe hacer un análisis de lo que está pasando para detenerse y comenzar a construir otra manera de educar en Venezuela,que sea sincera. Se debe reprobar cuantas veces sea necesario hasta que el estudiante construya las competencias necesarias para ir avanzando en aprendizajes. Si el niño tiene dificultad para aprender se deben buscar las causas de ello y atenderlos. Debe haber menos cantidad de niños en los salones, maestros más preparados, personal altamente especializado para atender las necesidades de los estudiantes con diversidad funcional. Además, deben enseñar a leer con comprensión, y las operaciones matemáticas básicas, sin proyectos.
