Se llaman fonemas a las formas que toman los sonidos con la articulación en la pronunciación. Y esas formas graficadas convencionalmente se les llama letras. Letra y fonema expresan las unidades básicas del idioma, pero el fonema es auditivo y la letra es visual. El fonema es imagen sonora, la letra es imagen visual. Ilustramos las formas de las letras, así: a, b, c, d,…etc. Y las formas de los fonemas, así: a, be, ce, de,…etc. Las letras, incluyendo las vocales, son todas unilíteras; todas se expresan con una sola letra: a, b, c, che, d, e, f, g, h, i, j, k, l, ll, m, n, ñ, o, p, q, r, rr, s, t, u, v, x, y, z. Las formas de los fonemas pueden ser unífonos, bífónos, trífónos y cuadrífónos, así: son unífónos los sonidos de las vocales. Las consonantes todas son pronunciables si se apoyan en las vocales;y pueden ser: bífónos, bilíteras, los sonidos: be, ce, che, de, ge, ka, pe, cu (q), te, ye. Una gran mayoría de consonantes, como se aprecia en el ejemplo de la línea que a ésta precede, se apoyan en la vocal e, con las excepciones de la ka y cu, cuyas vocales son: a, u. Son trífónos, trilíteras, efe, ele, elle, eme, ene, eñe, ere, erre, ese uve. Y son cuadrífónos, cuadrilíteras: hache, jota, zeta. El fonema equis tiene cinco letras.
Como vemos, las formas de las letras y de los fonemas del alfabeto del castellano son diferentes. Para la escritura, las letras se reproducen gráficamente con formas unilíteras. En tanto que, los fonemas de las consonantes que solamente se pueden pronunciar con el auxilio de las vocales, como anteriormente lo dejamos impreso. Por su formas en la pronunciación pueden ser: bífónas, bilíteras; trífónas, trilíteras; cuadrífónas cuadrilíteras y quintífónas, quintilíteras.
Las formas de las unidades del abecedario, alfabeto del idioma castellano, son diferentes para la pronunciación y son diferentes para la escritura. La únicas formas que son iguales tanto para los fonemas como para la escritura son las vocales. Es curioso que en nuestro idioma las unidades básicas con las cuales se obtienen las formas estructurales de las palabras, tengan características diferentes según se las utilice para el habla o para la escritura. Sin embargo, como la escritura de las letras son formas yacientes como individuos en estado cataléptico, son las fonemas en la pronunciación los que le imprimen a las letras de la escritura esa vitalidad necesaria y activa tan útil para comprender no solo sus contenidos sino, también, los estados emocionales del escritor y del lector.