Una alta funcionaria del gobierno cubano informó el martes que las negociaciones entre la isla y Estados Unidos sobre derechos humanos resaltaron las diferencias en la materia que tienen ambas partes.
Un reporte de la televisión cubana desde Washington, donde se realizaron las conversaciones, dio cuenta del fin de la breve cita.
«Se ratificó que existen diferencias entre ambos países en tema de derechos humanos», dijo a la televisión cubana Anayansi Rodríguez Camejo, embajadora de Cuba ante las Naciones Unidas en Ginebra y miembro de la delegación de la isla en la cita.
Rodríguez Camejo agregó que «sin embargo, ha quedado demostrado que somos capaces de tener una conversación respetuosa, profesional, civilizada en esos temas».
No se informaron los resultados de las conversaciones que se realizaron a puertas cerradas y que habían comenzado en la mañana del martes.
Las delegaciones acodaron esta cita a propuesta de Cuba en el marco de una serie de rondas de altos funcionarios que comenzaron luego de que en diciembre los presidentes Barack Obama y Raúl Castro iniciaran un proceso de distensión tras cinco décadas de ruptura.
Si las negociaciones de primer nivel prosperan se espera una próxima apertura de embajadas y posteriormente la normalización de las relaciones, que podría llegar a incluir el levantamiento de las sanciones que Washington impuso a la isla en los años 60 para presionar por cambios en su modelo de gobierno.
Los derechos humanos son un punto de discordia histórico entre ambas naciones.
Cuba alega que promueve y ejecuta cuestiones sociales como la educación y salud gratuitas y defiende su derecho a un modelo de partido único y elección indirecta.
Estados Unidos, por su parte, acusa a La Habana de no respetar los derechos ciudadanos y suele hacer declaraciones exigiendo la libertad de asociación.