Santa Rosa, pueblo espiritual del estado Lara, se prepara para recibir a la excelsa patrona. El próximo
sábado 28 de marzo, la Virgen regresará a su templo para conmemorar, en su morada, la Semana Mayor.
Como ocurre cada año, tras un largo peregrinar por más de 60 parroquias, la sagrada imagen de la Divina
Pastora se reencontrará con su terruño y sus devotos.
Para este acontecimiento el Instituto Municipal de la Vivienda (IMVI) remozó la pintura del santuario. Los colores blanco, salmón, vinotinto extravagante y gris, son los tonos que descubre el exterior del templo, según página oficial del IMVI.
“La paleta de colores está inspirada en catedrales de Latinoamérica. La nueva gama acentúa la hermosura del templo y está acorde con los matices del interior”.
Se acondicionó la fachada para los trabajos de pintura, entre otras reparaciones puntuales, como la reposición de los frisos.
Sin embargo, Santa Rosa no puede reducirse a su plaza, ni al santuario. Existen otras áreas a su alrededor
que aguardan por la mirada atenta de las autoridades.
Tal es el caso del anfiteatro que se encuentra en la parte posterior de la Sala de Reconciliación, donde muy bien pudiera ofrecer conciertos el núcleo de orquestas de la localidad.
Pudiera adecuarse para actividades culturales, recreativas y de esparcimiento. El lugar cuenta con un escenario y escalones en los cuales pudieran ubicarse los concurrentes. No obstante, la realidad es otra. El monte, la basura, luminarias en pésimo estado y paredes rayadas por los vándalos, alejan toda posibilidad de entretenimiento.