Este domingo, habitantes de la urbanización El Obelisco, al oeste de la ciudad, se concentraron en la avenida Libertador con calle 56, para rechazar los últimos hechos de violencia ocurridos en la zona.
Voceros del consejo comunal Obelisco II, expresaron que están en desacuerdo con que personas no identificadas se hayan dado a la tarea de realizar guarimbas cerca de sus residencias.
“Como es del conocimiento público, la avenida Libertador con calle 54 se ha convertido en un punto de concentración para el caos y violencia, producto de la irresponsabilidad de algunas personas que piensan que a través de las guarimbas pueden lograr sus objetivos.
Estos sujetos no toman en consideración el daño que le hacen a la sociedad, puesto que actuan de manera irracional”, dijo uno de los entrevistados.
Otro, explicó que al momento de armar las guarimbas, estas personas sacan las bolsas de basura de los urbanismos y las queman en plena avenida, generando así la posibilidad de que ocurra algún tipo de accidente entre quienes transitan por el lugar.
Indicaron que señal de protesta, destapan las alcantarillas para obstaculizar el paso de los vehículos, sin embargo, cuando cae la oscuridad de la noche no se aprecia con facilidad, lo cual pone en riesgo la vida de los conductores y transeúntes.
Del mismo modo, el vocero aseguró que “los guarimberos” han agredido las unidades de Transbarca que circulan por la avenida Libertador. Precisó que les han lanzado piedras y otros objetos contundentes.
Por esta razón, cuando hay protestas las unidades de transporte público cambian su ruta para evitar posibles daños. Sin embargo, al modificar su recorrido dejan de prestarle el servicio a los residentes de El Obelisco, Santa Eduviges y Centro Metropolitano Javier.
Aunado a ello, otro elemento que causa gran preocupación a los vecinos es que el lugar donde se produce la violencia queda cerca de la Escuela Bolivariana El Obelisco. En este sentido, exhortan a recapacitar y reflexionar.
“Los guarimberos deben comprender que la violencia genera más violencia y nosotros, quienes residimos en la zona, queremos paz, tranquilidad, seguridad y armonía.
No queremos vivir angustiados pensando en que en cualquier momento se puede producir una protesta. Nuestro llamado de atención también es para las autoridades”.
