Continúa indetenible la intervención de los espacios destinados a zonas agrícolas con intención de urbanizarlas dentro del Área Bajo Régimen de Administración Especial, ABRAE.
Ahora le toca el turno a la zona de El Peñusco, asentamiento agrícola enclavado desde tiempos remotos en el Valle del río Turbio, dentro de la parroquia Agua Viva.
En el sitio, una buena porción de tierra fue deforestada y parcelada, en donde se observan unos diez terraplenes y estructuras para levantar viviendas.
En ese sentido, el cronista de Agua Viva, José Luis Sotillo, manifestó su preocupación por “una presumible masificación de construcción de viviendas en la zona de aprovechamiento agrícola del Valle del Turbio”.
Hemos constatado -adicionó Sotillo-, que un supuesto propietario de grandes extensiones de tierra aledaños al caserío El Peñusco, ha venido deforestando arbustos de Leucaena para edificar la cerca perimetral.
El cronista alertó a las alcaldías de Palavecino, Iribarren y Peña en el estado Yaracuy, asimismo a la Gobernación de Lara y Ministerio del Ambiente, para que reúna la Comisión Interinstitucional que debe evaluar la trágica situación que confronta una vez más el Valle del Turbio.
Desconocen planes
A juicio de Sotillo, las estructuras comunales de Agua Viva, desconocen los planes de viviendas que pretenden construirse en El Peñusco.
“Se habla de personas muy influyentes, que han venido deforestando no solo en Agua Viva, sino también en El Placer, en donde se involucran al INTI y Misión Vivienda, hecho alarmante toda vez que estamos hablando de la construcción de casas clandestinas cuyo conocimiento ignoran la Cámara Municipal y la misma Alcaldía de Palavecino”, aseguró el cronista.
Se opusieron al estadio
El funcionario recordó que en su debida oportunidad, organizaciones civiles y comunitarias, se opusieron a la construcción, en ese sitio, del Estadio Metropolitano pero ahora se pretende densificar la zona con unas 40 viviendas, que de hecho son para personas foráneas y no para residentes autóctonos de El Peñusco.
Advirtió que Guardería Ambiental “no tiene absoluto conocimiento de lo que sucede en el lugar”.
