El base Heissler Guillent, capitán de los Guaros de Lara, reconoce que la plantilla está muy complacida por el gran momento que vive, tras haber barrido en casa a los Cocodrilos de Caracas, pero es cauteloso y afirma que el grupo va con mucha humildad, paso a paso, porque sabe que aún hay camino por recorrer y no se ha logrado nada.
“Logramos una de las cosas más importantes, que era ganar los dos partidos. Habíamos perdido uno en casa y necesitábamos conseguir una barrida”, explicó quien durante la serie repartió 15 asistencias y aportó 26 puntos.
“Estoy contento con el trabajo que estamos haciendo como equipo. Cuando salí del segundo juego, aparte de ganar, me alegré cuando supe que teníamos seis jugadores con doble figura. Estamos llevando a cabo lo que pide el cuerpo técnico, estamos mejorando. No hay egoísmos, la pasamos para que lance el que está abierto”, explica sobre el éxito de la ofensiva al encontrar espacios para producir.
“También estamos jugando muy buena defensa, estamos entre los mejores de la liga y eso nos tiene contentos. Tenemos mucho camino por delante, pero lo que tenemos hasta ahora nos motiva y queremos seguir mejorando. Yo quiero ayudar y poner mi granito de arena”, afirma el orgullo del barrio Kennedy.
Al ser consultado por la condición física del grupo, que en ambos juegos resistió hasta el final el ritmo vertiginoso de los compromisos, la constante carrera e incluso hizo que Cocodrilos se viese cansado en el último cuarto, reconoce que el grupo estuvo “mejor físicamente al final de los juegos” y que “de los errores se aprende”.
A su juicio, la clave estuvo en que “tratamos de corregir en aquello que nos dice el cuerpo técnico, que nos exige mucho, pero nos dice los errores, nos dice cómo bajar las pérdidas y no permitir rebotes ofensivos. Nos ayuda en cosas como esas. Hemos tratado de ejecutar y de corregir todo lo que nos han dicho”.
Además asume la responsabilidad por las derrotas. “Contra Guaiqueríes tuvimos 27 por ciento de cancha, permitimos 15 rebotes ofensivos y 13 de ellos en la segunda mitad. Contra Gigantes fallamos 12 triples sólo en la segunda mitad y aunque hemos cometido muchos errores, hemos estado cerca de ganar esos juegos y eso nos da alivio”.
Cree que la buena arrancada de Guaros sirve para hacer saber a los otros equipos que “estamos aquí trabajando duro y aspiramos a estar en los primeros lugares, para poner el nombre de nuestro equipo entre los fuertes de esta liga, que está difícil porque está muy pareja”.
Ya tiene la mente puesta en la visita a Trotamundos de Carabobo el próximo fin de semana. “Hay que jugarles duro y ser inteligentes para sacar un buen resultado. Tenemos muchas esperanzas, estamos motivados y esperamos hacer un buen trabajo. En estos días recuperaremos a quienes tienen dolencias, haremos los ajustes y veremos la estrategia que el cuerpo técnico quiere de nosotros allá para llevarla a cabo”.