“Aquí no hay invasores porque no hemos ocupado el terreno, solo lo estamos resguardando desde la parte delantera, aunque somos más de 263 familias con necesidad de vivienda”.
Así lo declaró Ambar Meléndez, organizadora de la ocupación del lote de la UCLA, frente a la redoma de Agua Viva, predio ocupado el pasado viernes en horas de la noche.
Indicó que no se ha violentado el lugar, tampoco han deforestado, quemado la maleza, “simplemente hemos hecho una toma pacífica en la parte de afuera, resguardando un terreno ocioso por más de 35 años, sin ningún beneficio para las comunidades aledañas”, acotó.
Detalló que las familias ocupantes son “todas” de lugares aledaños “y no foráneos como lo han dejado ver. También nos vinculan al Psuv, lo cual es falso. Aquí hay libre pensamiento y menos tenemos un líder”.
Resaltó que de cada sector cercano al lote, se han acercado dirigentes del los diferentes consejos comunales para apoyarlos.
Papel que no reconocerán
A pesar que entre la Sindicatura Municipal de Palavecino y los ocupantes se acordó efectuar una mesa de diálogo en donde se demostraría la titularidad de la tierra a favor de la UCLA, “la desconoceremos porque nuestros derechos como venezolanos están por encima de una parcialidad”, dijeron.
Por su parte, Joel Hernández, quien se identificó como defensor de los derechos humanos, subrayó que en la mesa de diálogo la Sindicatura Municipal mostraría legalidad de documentos de propiedad, “pero le enviamos un mensaje: para qué, porque los mismos pudieran probar la propiedad de derecho de una persona, nosotros somos propietarios de hecho. Y así lo establece la ley”, delimitó.
Agregó que los derechos de los propietarios de hecho están por encima de los propietarios de derecho, porque se entiende que la tierra juega un fin social y quién le está dando ese fin a la parcela en cuestión, un documento o las familias en situación de vulnerabilidad.
“Si el síndico procurador nos muestra el documento de propiedad, nosotros le mostraremos el artículo 3 numeral 3 de la Ley de Emergencia de Terrenos y Viviendas, que detalla que el Estado venezolano no permitirá la existencia de terrenos ociosos, abandonados o subutilizados, y este predio reúne todas esas condiciones”, apuntó Hernández.
Asimismo, dudaron de la legalidad del documento de propiedad, “porque sabemos que aquí en Palavecino, es bien sabido que hay un cúmulo de propietarios que ostentan papeles que no aguantan un mínimo de investigación, cuando sale que han sido forjados o comprados, pagándole a síndicos, alcaldes, concejales y hasta jueces”.
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