Luego de veinte días de lucha por su vida, un pequeño de tan sólo un año y cuatro meses de edad, murió este viernes en el Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga.
Su abuelo, Alberto Torres (42), explicó que el niño se encontraba jugando dentro de su casa; de pronto comenzó a correr en la cocina y cayó dentro de una olla que se encontraba en el piso, la cual contenía agua caliente, debido a que se había hervido un pollo allí.
Una vez que sus familiares se percataron de lo sucedido, inmediatamente trasladaron al niño a un centro de salud en Acarigua, desde su vivienda ubicada en Agua Negra, cerca de la quebrada Honda de Guache en el estado Lara.
Sin embargo, debido a que gran parte de su cuerpo se vio afectado por las quemaduras, decidieron movilizarlo hasta el Pediátrico, donde estuvo hospitalizado desde el pasado 1° de febrero.
En ese lugar fue atendido por los médicos especialistas en el área, quienes al parecer indicaron a sus familiares que se salvaría.
Según Torres, esta semana los doctores les indicaron que la salud del pequeño se había complicado producto de una infección, la cual aparentemente fue la causante de su muerte.
“Estamos abrumados por el fallecimiento de nuestro niño, quien accidentalmente padeció por un gran sufrimiento, sabemos que ahora nuestro angelito se encuentra al lado de Dios”, dijo.