Las medidas económicas y ajuste cambiario planteado por el Gobierno nacional, si bien no son suficientes para controlar la voraz inflación, representan decisiones acertadas, tomando en cuenta el patrón ideológico e histórico que contextualiza la actual situación, en particular si se estima que el Banco Central de Venezuela (BCV) apuntó que en 2014 la inflación en alimentos se situó en un 102%.
Así lo expresó el analista económico y profesor de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado (UCLA), Gerardo Álvarez, quien explicó que si bien el dólar a Bs. 6,30 representa un subsidio insostenible, al igual que la gasolina, el ajuste de esta tasa podría significar un incremento del 200% y hasta 300% en el precio de los alimentos, lo cual impactaría directamente en el bolsillo de los venezolanos.
Sobre el control de este índice inflacionario, refirió que el Gobierno debió tomar ciertas medidas años atrás, a fin de evitar dicha situación, pero dentro del actual panorama, es preciso abordar un conjunto de decisiones integrales, como eliminar la indisciplina fiscal y la emisión inorgánica, además de estimular la producción nacional.
Sin embargo, se trata de estrategias que tendrían un impacto en las finanzas de todos los venezolanos y que, a su juicio no se toman, por ser el 2015 año de elección parlamentaria.
Advierte que la unificación cambiaria podría ser una medida acertada. No obstante, esta surtirá efecto positivo, en la medida en que sea aplicada en conjunto con un plan integral.
Porcentaje sobre estimado
Sobre la afirmación del ministro de Banca Pública y Finanzas, Rodolfo Marco Torres, quien señaló que el dólar preferencial será destinado al 70% del sector productivo venezolano, se mostró en contra de esta afirmación y dijo que se trata de una “mentira” que se desmiente por sí sola, ya que la economía venezolana es más que alimentos y medicinas.
Si bien se trata de sectores prioritarios, detalló que el venezolano en su estructura presupuestaria destina una parte considerable de su dinero al pago de servicios, colegio, vestimenta, transporte y otros, los cuales también dependen indirectamente de la asignación de divisas, por lo cual la migración de sectores a Sicad Único y el Sistema Marginal de Divisas (Simadi) representa una considerable devaluación de la moneda.
Distorsión cambiaria
El economista advierte que existe una grave distorsión cambiaria del sistema venezolano, ya que el piso o dólar a Bs. 6,30, está 27 veces por debajo de la cima o Simadi, que tampoco tiene techo.
En su opinión, esto genera una confusa e inestable situación en el mercado, la cual produce rupturas en la estructura presupuestaria de los sistemas productivos y, consecuentemente, de los venezolanos.
Recordó que el Gobierno venezolano ha dicho que reconocerá el dólar Simadi, como parte de las estructuras presupuestarias.
Agregó que el dólar a Bs. 6,30 es insostenible, pero forma parte de una estrategia política del Gobierno.
Además, cree probable que después de las elecciones parlamentarias, el Ejecutivo, ajuste o elimine el sistema de múltiples tasas.
Necesaria oferta de dólares
Considera una lamentable distorsión que la economía se maneje a través de cuatro sistemas de cambio, si se suma a esto el mercado paralelo.
En tal sentido, plantea sus dudas sobre si Simadi realmente pueda hacer contrapeso al mercado negro, debido a la baja en el precio del barril de petróleo, único producto generador de divisas para Venezuela.
Advierte que el Sistema Marginal de Divisas, sólo podrá eliminar el mercado negro si existe la suficiente oferta de dólares para responder a la demanda.
Preocupación más profunda
Resulta preocupante para Álvarez que la cifra de inflación en alimentos se sitúe en 102%. No obstante, sostiene que el sector divisas es sólo una arista de esta gran problemática presente, la cual requiere de un estudio y análisis macroeconómico, a fin de concebir posibles estrategias.
Entre las decisiones a tomar deben reactivar del aparato productivo y con esto revertir las expropiaciones ejecutadas años atrás. Sostiene que el Gobierno por sí solo, no podrá resolver la situación ya que requiere del apoyo del sector privado.