La música venezolana y académica se hizo sentir en los espacios de nuestra casa editorial el pasado martes cuando jóvenes del Núcleo Santa Rosa, desbordaron en la recepción de EL IMPULSO su genialidad, talento y entusiasmo con motivo del aniversario del Sistema de Coros y Orquestas de Venezuela.
El programa, fundado por el maestro José Antonio Abreu, celebra por todo lo alto sus 40 años de vida con la Fiesta del Millón, iniciativa que activó todas las células musicales del país.
Numerosos niños y jóvenes salen diariamente de sus núcleos, conjuntamente con sus profesores, en forma de dúos, tríos, cuartetos y ensambles, para ofrecer micro conciertos de 30 minutos de duración que, sin duda alguna, cautivan a los sorprendidos peatones y concurrentes.
En nuestro caso, recibimos al profesor Luis Giménez, representante ícono del Sistema en Lara, fundador del proyecto en la región, quien nos honró al tocar junto a los habilidosos muchachos.
Los integrantes de la Orquesta Sinfónica Juvenil e Infantil Divina Pastora, sumaron un concierto más. Su compromiso son 3.000 presentaciones.
Festín vespertino
Justo a las 3:00 de la tarde, los artistas arribaron a nuestra sede para interpretar La Marcha de Haendel, el Himno de la Alegría para tres cellos de Beethoven y La Perica de Lino Gallardo, sin mencionar el solo de cuatro que ejecutó el profesor Roger González, quien interpretó el mundialmente famoso tema Moliendo café de Hugo Blanco.
Se destaca que bajo la iniciativa del maestro Abreu y la responsabilidad del profesor José Luis Giménez, hijo de Luis Giménez, se fundó este núcleo el 22 de junio de 2010.
Hoy, esta institución cobija el talento de unos 1.000 niños y jóvenes. Aunque no tiene sede propia, en los espacios libres de la comunidad, como la plaza, el mirador, el teatrillo y hasta en la Sala de Reconciliación, se escuchan los maravillosos sonidos del Sistema.
“Celebramos la dicha de poder ser parte de este sueño, festejar el aniversario del Sistema y formar parte de la Fiesta del Millón”, coincidieron los niños, quienes previo a la muestra, compartieron sus testimonios.
Roger González, joven cuatrista y uno de los formadores del núcleo, expresó que con pequeños conciertos tratan de llevar al pueblo, que no conoce el trabajo de la orquesta, esas melodías que concibe el programa social, el más importante del mundo y verdaderamente inclusivo.
“Presentamos conciertos cortos y sencillos, se movilizan dos o tres muchachos, quienes regalan sus conocimientos sobre el instrumento y las obras aprendidas”.
Dixmar Goyo (violonchelo), agregó que El Sistema la colma de alegría. “He aprendido muchas cosas, he conocido personas importantes y motivadoras que considero mi familia. Tengo casi cinco años en el programa”.
Claudio Márquez (violonchelo), apuntó que este 40 aniversario es muy importante porque se quiere llevar a todos los rincones del país, especialmente a las escuelas, la música venezolana y académica.
“Es una iniciativa que enriquece nuestra cultura, valores que se han perdido y que tenemos la misión de rescatar. Ese es el propósito del Sistema”.
Finalmente, la fagotista Ruth Morán, aseguró que la gente ha sido muy receptiva, muchos se sorprenden.
“Tocamos en lugares diferentes, fuera de los auditorios. En escuelas, plazas, panaderías, en muchos lugares que no están acostumbrados a vernos. Además, tocamos variedad de obras”.