La inteligencia militar estadounidense prevé que el gobierno de Nicolás Maduro se verá enfrentado este año a más protestas callejeras de estudiantes y opositores.
Vincent Stewart, director de la Agencia de Inteligencia del Departamento de Defensa, escribió un informe a la comisión de asuntos militares de la cámara baja sobre amenazas globales para la seguridad nacional estadounidense.
En el informe presentado a la comisión legislativa dijo que las protestas son previsibles porque Maduro no ha resuelto los factores que contribuyeron a las manifestaciones callejeras que dejaron 43 muertes el año pasado.
Afirmó que los jefes militares han permanecido leales al gobierno de Maduro «y continuarán sofocando protestas antigubernamentales». Según el informe, las fuerzas de seguridad venezolanas usarán ocasionalmente tácticas severas para restaurar el orden.
Stewart ofreció su análisis al día siguiente que Estados Unidos anunciara que suspenderá las visas a un número no determinado de funcionarios venezolanos activos y retirados, acusados de violar derechos humanos e incurrir en actos de corrupción en su país.
Ya el Departamento de Estado suspendió en julio las visas a 24 funcionarios venezolanos acusados de violar derechos humanos.
Maduro repudió el anunció y afirmó que no acepta imposiciones de ningún gobierno.
Venezuela está sumida en una crisis económica, caracterizada por una inflación galopante que superó el año pasado el 64%, problemas severos de escasez y una recesión, que analistas proyectan que se agravará este año por la caída de los precios del petróleo que es la principal fuente de ingresos del país.