Mensaje a la FANB
Los ciudadanos están agobiados por la inseguridad, la escasez, la inflación y la ausencia de futuro. Las instituciones del Estado están corroídas, la economía devastada y como consecuencia el creciente descontento encuentra su legítima expresión en las protestas y manifestaciones pacificas.
Frente a esta realidad, la respuesta del Ministro de la Defensa tendría que ser la de impulsar una rigurosa y transparente investigación para esclarecer los hechos y salvaguardar el honor de la FAN, para el establecimiento de las responsabilidades que de la investigación se deriven, pero por el contrario, su reacción ha sido la de amenazar con voltear las armas de la República en contra de los ciudadanos que manifiesten su descontento.
La resolución Nº 8610 dictada por el Ministro de la Defensa, Mayor General Vladimir Padrino López, es violatoria del artículo 68 de la Constitución, el cual, reconoce el derecho de manifestación y prohíbe expresamente el uso de armas de fuego y sustancias tóxicas en el control de manifestaciones pacíficas. Lo peor es que se trata de una disposición contra la población civil y no en contra de un ejército enemigo.
Esta disposición es un intento burdo, inaceptable e indigno por parte del Ministro de la Defensa, de colocar a la institución armada al servicio de los intereses del régimen y del PSUV en la represión del descontento masivo que expresa el pueblo venezolano. Este régimen ha intentado destruir la institución militar mediante la creación de grupos paramilitares, el deterioro del apresto operacional, la creación de la inconstitucional Milicia Nacional y la división política e ideológica interna.
La FAN no tiene la misión de reprimir a la población civil. La Fuerza Armada Nacional constituye una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberanía de la Nación y asegurar la integridad del espacio geográfico, mediante la defensa militar, la cooperación en el mantenimiento del orden interno y la participación activa en el desarrollo nacional, de acuerdo con la Constitución.
La violación de derechos humanos y en este caso el uso de fuerza militar contra civiles, es un delito de orden internacional, no prescribe y no es protegido o justificado por haber cumplido órdenes superiores; es de responsabilidad personal.
En esta coyuntura tan decisiva y crítica, confiamos en que los ciudadanos soldados cumplirán su deber y no atenderán órdenes para reprimir. Nuestra FAN existe para proteger al pueblo, no para agredirlo.
Ciudadanos soldados, ustedes saben cómo nosotros que vivimos una crisis nacional sin precedente y para su resolución, la Republica espera, necesita y confía en que la institución armada estará a la altura de la historia en el marco estricto de la Constitución.