Persistencia, es la palabra que engloba la labor desempeñada por el Movimiento de Educación Popular Fe y Alegría, una organización que ha dejado grandes frutos al país y que se encuentra próxima a celebrar sus 60 años de existencia en Venezuela.
“La iniciativa de educar a niños de los barrios populares de Caracas que el sacerdote jesuita José María Velaz emprendiera a comienzos de 1955, se ha convertido en un establecimiento multinacional que opera con dedicación, a pesar de las frecuentes dificultades, en 20 países distribuidos en tres continentes. Si un valor hay que destacar cada vez que se piensa en Fe y Alegría, ese es el de la persistencia”, señala Erika Briceño, miembro del área de Comunicaciones del Movimiento, en un abreboca de la celebración aniversaria enviada a este rotativo.
“La organización ha crecido a lo largo de 60 años, pero el análisis de ese crecimiento revela a una institución con un profundo sentido de realidad. Más que reproducir un mismo modelo educativo aquí y allá, Fe y Alegría ha mostrado una admirable capacidad para adaptarse a las más diversas necesidades educativas de la sociedad venezolana”, explica.
Desde sus inicios Fe y Alegría ha contado con la solidaridad y el apoyo incondicional del pueblo para el fortalecimiento de la labor socio-educativa, “lo cual ha sido de gran ayuda para la dotación de aulas, talleres, laboratorios y su debida sostenibilidad, garantizando así la calidad en educación que impartimos”, destaca Jovan Heredia desde la Dirección Regional Fe y Alegría Lara- Llanos.
Este año, el lema conmemorativo es ‘Trabajamos por el futuro’ y la campaña correspondiente inició este miércoles 21 de enero. “Con ella esperamos seguir construyendo una educación popular de calidad; esto, junto a los distintos sectores de un país que apuesta por la formación integral para el trabajo y para la vida de sus niños, niñas, adolescentes”, destaca Heredia en conversación con este rotativo.
Al respecto de la conmemoración, Herlinda Gamboa, directora del Instituto Universitario Jesús Obrero de Barquisimeto (IUJO), reflexiona que en Fe y Alegría “trabajamos por el futuro con esperanza dinámica, comprometida y confiada. Conscientes de cada esfuerzo, cada siembra, cada aprendizaje”.
Venezuela nos necesita como trabajadores del futuro, acota, gente que ama esta tierra y se compromete en hacerla grande, justa y fraterna. “Por esta tierra que todos queremos, conscientes de nuestro aporte estamos dispuestos durante el nuevo año, a impulsar la educación técnica desde las distintas regiones del país. La realización de este gran reto nos permitirá contribuir en la formación de nuestros jóvenes para hacer realidad la producción nacional fuente de trabajo digno y honesto. Seguir apostando por la calidad educativa fortaleciendo los distintos niveles de la educación será garantía de un futuro mejor, más digno y más humano”.
Apuesta por los pobres
La identidad de Fe y Alegría es definida de la siguiente manera: “Es un Movimiento de Educación Popular y de promoción social que nacido e impulsado por la vivencia de la fe cristiana, frente a situaciones de injusticia, se compromete con el proceso histórico de los sectores populares en la construcción de una sociedad justa y fraterna.
Fe y Alegría hace una opción por los pobres, y en coherencia con ella escoge los sectores más necesitados para realizar su acción educativa y de promoción social; desde allí, dirige a la sociedad en general su reclamo constante en búsqueda de un mundo más humano”, se destaca en la página web feyalegria.com.
“Todas las grandes obras nacen de procesos que han conmovido las fibras íntimas del ser humano”, narra la historia de su fundación cuyo protagonista es José María Vélaz, chileno de nacimiento y de familia española, cuya formación estuvo ligada a los colegios de la Compañía de Jesús.
“En su juventud, luego de algunos años en la universidad, optaría por hacerse miembro de dicha Congregación religiosa y desde entonces, al igual que el fundador de la orden (San Ignacio de Loyola), se haría un peregrino y constructor de esperanza. En 1946 fue destinado a Venezuela, cuando contaba con 36 años de vida y 18 de jesuita”
“El contacto con la pobreza y las escandalosas condiciones de marginación y exclusión de las mayorías del país lo interpelarían de manera definitiva. Cuando trabajaba en el Colegio San José de Mérida comenzó a realizar los primeros experimentos, que finalmente apuntarían a la conformación de una red de escuelas en las periferias de las ciudades y en el área rural. Sería en 1960 cuando esa red fue bautizada con el nombre de Fe y Alegría”.
Los padres y los niños de las primeras escuelas fueron auténticos gestores de una de las obras educativas más importantes de Latinoamérica, que hoy se extiende hacia otras latitudes del mundo. “En efecto, en la memoria de esta apasionante historia se conserva el nombre de quien podríamos considerar el auténtico fundador de Fe y Alegría, un obrero llamado Abrahám Reyes. Vélaz y su grupo de colaboradores recorrían los suburbios buscando un lugar donde instalar la primera escuela, hasta que se encontraron con este personaje.
Se cuenta que Reyes y su esposa llevaban ocho largos años levantando los muros de su hogar y el día que les hablaron de una escuela y de educación para los niños, entregaron esas paredes y ese techo, sin mayor ceremonia que su propia felicidad”. Otras familias siguieron el ejemplo y así comenzó a forjarse la historia de esta gran organización.
Agradecimiento y promoción
A propósito del inicio oficial de la campaña aniversario de Fe y Alegría, que se extenderá durante todo el año, como parte de la tradicional promoción institucional, se llevarán a cabo distintas actividades que buscan agradecer y empoderar a toda la comunidad de la zona Lara Llanos, en el primer trimestre se desarrollarán las siguientes actividades:
-Lanzamiento de la Rifa Anual, del 21 al 23 de marzo.
-Invasión educativa a los medios del 2 al 6 de marzo.
-Foro: La Educación Técnica Cambia Vidas ¡Apóyala! El 21 de Abril de 2015.
-Sorteo de la gran Rifa Anual Fe y Alegría 2015, el día 22 de Abril de 2015.
El costo del boleto de la acostumbrada rifa anual es de Bs. 25; cada talonario esta compuesto por 5 boletos, y se sortearán los siguientes premios:
-3 kits de electrodomésticos.
-7 televisores.
-5 computadoras portátiles.
-5 teléfonos celulares.
-5 tabletas.
Como cada año, la organización apela “al deseo incesante de la comunidad de la zona Lara Llanos de aportar significativamente a la educación de más de 19.000 participantes entre niños, adolescentes y adultos destinatarios de nuestra propuesta de educación popular de calidad”.