Cuando el presidente venezolano Nicolás Maduro regrese de un periplo que hasta ahora lo ha llevado a siete países en busca de dinero encontrará la economía petrolera de Venezuela tambaleando y a sus compatriotas desesperados en busca productos básicos en las vacías estanterías de los supermercados.
En las últimas dos semanas, Maduro ha viajado alrededor del mundo en busca de apoyo para su nación, cuya economía depende del petróleo, mientras que el gobierno ha desplegado soldados para evitar desbandadas y saqueos de los supermercados, y los líderes empresariales han advertido que las reservas de alimentos se agotarán a principios de marzo.
Además, los opositores políticos se están movilizando y los inversores extranjeros se están preparando para un posible impago de la deuda económica.