Las intempestivas suspensiones en el suministro de electricidad, los conocidos apagones, se incrementarán en todo el país conforme avance el año debido a que el Gobierno no ha atendido la situación de los equipos como debe ser.
Hizo la advertencia Mario Briceño, del Sindicato de Trabajadores de la Industria Eléctrica de Lara, al ser consultado sobre los problemas que confrontan las instalaciones de Corpoelec.
Lo hizo a raíz de las preocupaciones por parte de los habitantes de algunos sectores larenses, en especial Palavecino, donde la noche del domingo se registró una cadena de interrupciones del suministro eléctrico provocando daños en muchos artefactos.
“No tenemos equipos, no tenemos herramientas para trabajar, no tenemos uniformes, Corpoelec no ha recibido nada durante los últimos meses”, afirmó el dirigente de los trabajadores de la empresa.
Explicó que en Planta 3 (Zona Industrial), se iban a instalar tres turbinas de 100 megavatios, pero apenas han instalado una de 40.
Lo mismo ocurre en la subestación Argimiro Gabaldón (Cabudare), donde se tenía previsto instalar otra turbina que generaría entre 30 o 40 megavatios, pero ni siquiera han terminado el proyecto, afirmó.
Todo se debe a que no se asignaron los presupuestos necesarios para la adquisición de los equipos que permitirían un incremento en la generación eléctrica.
Otra subestación que se ha quedado sin terminal es la de Duaca, llamada del Norte, que estaría destinada a generar la electricidad para las más de 4 mil familias que habitarán los nuevos edificios del sector Yucatán, refirió.
Considera necesarias esas instalaciones pues, de no ponerse en servicio, colapsará toda la zona norte de Barquisimeto y Duaca por insuficiencia de los actuales equipos para suministrar la electricidad requerida.
“La ampliación de la subestación Aguada Grande también se quedó en los papeles”, dijo Briceño.
La situación de Planta Centro tampoco es la mejor, como lo demuestran las frecuentes fallas.
Recordó que ofrecieron para el 2011 la tranferencia de las turbinas de gasoil a gas pero nada se ha hecho al respecto.
“Los apagones se incrementarán los meses venideros cuando inicien sus actividades plenamente las fábricas que suspendieron las mismas por la temporada navideña”, afirmó.
Por otra parte, denunció que desde Corpoelec quisieron obligar a sus trabajadores a firmar contratos de confidencialidad mediante los cuales no se les permite notificar fallas atribuidas a falta de equipos.
El sindicato, en el caso de Lara, tomó las medidas correspondientes recomendando a sus afiliados no firmar esos contratos pues de hacerlo estarían en riesgo de ser destituidos y hasta detenidos si alguno de los jefes considera que incurrió en la violación de algunas cláusulas de esos documentos.
Dio a entender que lo que quiere la empresa es que ningún trabajador denuncie alguna irregularidad de la que tenga conocimiento, aún cuando ponga en peligro su vida.