Hace 40 años la señora María del Carmen Crestelo llegó desde Galicia a Venezuela. En este país logró formar una familia, junto a su esposo. El destino y las ganas de trabajar y salir adelante la trajo hace más de dos décadas hasta la capital larense. Un encuentro de uno de sus hijos con la Divina Pastora en el baño de su casa empezó una devoción que hasta hoy perdura.
Aquí les dejamos la historia de fe de la Sra. María, quien hoy dedica su tiempo a crear imágenes de la Excelsa Patrona, las cuales elabora con todo el cariño y la devoción que merece la virgencita.