El mercado petrolero en el mundo no mejorará hasta tanto no aumente la demanda, y esto depende de la situación económica de los países europeos y China, que en 2014 registraron una desaceleración económica. Tal planteamiento fue hecho por el economista y asambleísta Salomón Centeno, con motivo del anuncio de gira internacional del presidente Nicolás Maduro.
Refirió que para países petroleros como Arabia Saudita, la disminución en su producción, planteamiento del presidente venezolano, no sería contemplado como una opción, puesto que el objetivo de estos es seguir penetrando en el mercado.
“Una disminución en la producción petrolera, haría que países que no están en la OPEP, ingresen en sus mercados y pierdan los espacios ya conquistados”, expresó.
Centeno recordó que el problema en el sector petrolero, no obedece a intereses particulares de un país, como Venezuela, sino a políticas económicas del mundo.
Citó que el exministro de Energía y Minas, Rafael Ramírez, meses atrás realizó el mismo planteamiento en el exterior, sin mayor éxito.
Intereses de China
Sobre la escala de Maduro en China, refirió que en este punto es preciso preguntarse: ¿Cuál sería la ganancia o el interés de este país en ayudar económicamente a Venezuela?
Comentó que si bien el país asiático es ideológicamente comunista, ha asumido posturas mercantilistas y pragmáticas en sus finanzas.
“No harán nada sin una contraparte importante que garantice la inversión realizada”, apuntó.
Falta de medidas económicas
Ante el anuncio de cambio en la directiva del Centro de Comercio Exterior (Cencoex), Centeno manifestó que el problema en el sistema cambiario no se resuelve con un cambio de este tipo, sino con la toma de las decisiones necesarias.
Apuntó que este tipo de reformas retardan la toma de las medidas económicas que se esperaban para principio de 2015. Esto demostraría que quienes han ocupado dichos cargos, no han tenido mayores avances.
“Significa que los análisis hechos por la antigua directiva ya no serán aplicados. Ahora se debe esperar a que los nuevos funcionarios estudien la situación y expongan sus estrategias, si es que las toman, lo cual representa más tiempo, incremento de la crisis e impacto para el ciudadano”, comentó.
En su opinión es una “pérdida de tiempo” en un momento en el cual urgen medidas económicas como la unificación cambiaria, que técnicamente pareciera ser lo más aconsejable, en un escenario de tanta distorsión y carente de referencia en el precio del dólar. Dijo que un cambio de 6,30 como de 170 por dólar es absurdo.
Corregir el gasto público y la emisión de dinero inorgánico deberán ser otras de las medidas.