Con gran alegría la Fundación Municipal del Niño y la Fundación del Niño Dejando Huellas dieron la bienvenida a los primeros infantes nacidos en el 2015. Ambas instituciones articularon esfuerzos en una mega jornada especial de entrega de canastillas y obsequios a los primeros nacidos en el 2015.
Miguel Sebastián Vargas Vásquez, se convirtió en el primer barquisimetano nacido en el nuevo año. A las 12:15 de la madrugada de este 1° de enero, en la Sala de Maternidad del Hospital Central Antonio María Pineda (Hcamp) vino al mundo la primera bendición del 2015, quien registró un saludable peso de 3,600 kilogramos.
Su madre, Francis Vásquez, de 16 años de edad, habitante de la comunidad La Arboleda del sector El Jebe, al norte de la ciudad, expresó que su hijo es el mayor regalo de Dios y la vida. “Lo cuidaré y educaré para que sea un hombre de bien”, declaró emocionada.
En el marco del plan Un Nuevo Corazón Late en Iribarren, la señora Carmen de Ramos, Primera Dama del Municipio, ofrendó al primer iribarrense con un kit equipado con coche, cuna, silla mecedora y una canastilla con ropa para bebé, toallas humedas, pañales, bañera y otros accesorios de aseo personal.
“Este es un beneficio que deberían tener todos los niños del país, incluso tenemos una parturienta que viene desde el estado Falcón. La labor se nos hizo dificultosa por la escasez de productos, pero aún así cumplimos con la meta”.
Adelantó, que la institución arrancará este 2015 con un programa destinado a la responsabilidad de crianza y sexualidad responsable, por cuanto los índices de embarazo precoz van en aumento en el municipio.
Tradición de 14 años
Por decimocuarto año consecutivo, Marielba Díaz de Falcón, Primera Dama del estado Lara, realizó su tradicional bienvenida y ofrenda especial.
En su caso, le correspondió obsequiar una cuna al segundo larense que vino al mundo. Aleiber Isaac Castillo, nacido a las 03:50 de la madrugada con un peso de 3,350 kilogramos, fue beneficiado.
Así como también, la niña Valeria Valentina Gallardo Aguero, quien con un peso de 2,600 kilogramos, resultó ser la tercera criatura nacida en la ciudad. Sus padres recibieron de la titular de la Fundación del Niño Dejando Huellas un corral equipado con accesorios personales.
Un total de 89 parturientas que dieron a luz entre el 31 de diciembre 1 de enero, recibieron canastillas ofrendadas por las honorables damas.