La cantidad de cosas que podemos decir con nuestras posturas y expresiones, sin necesidad de pronunciar ni una sola palabra, es realmente infinita. Sin embargo, muchas veces lo hacemos de manera inconsciente, pues no sabemos con exactitud qué significan esos gestos que solemos hacer sin darnos cuenta. Por eso, hoy los invitamos a conocer un poco más acerca de nuestro lenguaje corporal, para así aprender a expresarnos correctamente a través de él
Ademanes, movimientos, gestos faciales, muecas y posturas. Aunque no lo hayamos notado, la lista de expresiones que realizamos durante una conversación es mucho más amplia de lo que pensamos y transmite mil veces más información de la que podemos manifestar mientras hablamos. Pensando en esto, un sinfín de especialistas en la materia, provenientes de diferentes partes del mundo, se dieron a la tarea de realizar estudios e investigaciones que profundizaran en este particular tipo de comunicación involuntaria, publicando sus interesantes descubrimientos en las más prestigiosas revistas.
Fue de esta manera que descubrimos la importancia del lenguaje corporal y de la manipulación inconsciente o voluntaria que le solemos hacer para obtener lo que deseamos o dar la impresión que queramos. Así que presten mucha atención y tengan cuidado con estos 10 movimientos, costumbres y gestos que, a pesar de ser tan comunes, pasan totalmente desapercibidos en la mayoría de los casos.
La postura
La primera impresión es la más importante de todas y por ello es vital asumir una buena postura cuando tengamos alguna reunión con personas importantes o la entrevista para ese trabajo que tanto deseamos. Con respecto a esto, Eliot Hoppe, especialista en lenguaje corporal y autor de varios libros, hace mucho énfasis en que lo ideal es mantener la espalda erguida, la frente en alto y caminar con energía, pues eso demuestra la confianza que tenemos en nosotros mismos y nuestros deseos de estar allí.
El apretón
En muchos países del mundo, un apretón de manos es la manera más respetuosa de saludar a alguien, la forma más adecuada de cerrar un negocio o la vía correcta para presentarnos ante un desconocido. Con respecto a esto, los expertos aseguran que a través de ese gesto podemos descubrir si la persona es dominante, agresiva o pasiva. Así mismo, afirman que apretar débilmente la mano transmite desconfianza o inseguridad, mientras que agarrar con la que nos quedó libre la muñeca, el brazo o el hombro del otro individuo, demuestra cariño y confianza.
El abrazo
Aunque no lo crean, cada vez que abrazamos un cojín, la cartera o cualquier cosa que tengamos a la mano, mientras hablamos con alguien más, estamos propensos a transmitir cierta timidez o incomodidad, pues este gesto podría ser interpretado como el deseo de escondernos detrás de un objeto. Así que tengan presente que es mejor colocar a un lado los elementos que cargamos al momento de entablar una conversación.
La mirada
Con el simple hecho de mirar directamente a los ojos a la persona con la que estamos conversando, demostramos seguridad y confianza en nosotros mismo, así como atención e interés en la charla, actitud que obviamente será tomada de manera positiva por el interlocutor. Por el contrario, si bajamos o desviamos la mirada, haremos que la otra persona experimente una sensación de inseguridad o desinterés en el tema que se está tratando.
El celular
Además de ser muy mala educación, esa manía de estar revisando el celular a cada rato mientras estamos sentados en una mesa con un grupo de personas o en el medio de cualquier tipo de charla, es una fuerte señal de que no nos interesa lo que los demás están diciendo. De igual modo, esto puede ser interpretado como un gesto arrogante y grosero que, sin duda alguna, le molesta a un altísimo porcentaje de individuos.
La vestimenta
Los jeanes rotos, las franelas decoloradas o los zapatos deportivos levemente manchados no tienen nada de malo si forman parte de esa onda “descuidada” que ha estado tan de moda últimamente. Pero algo totalmente diferente es andar todo el tiempo sucios o desarreglados, pues esto es muy desagradable para quienes nos están viendo y sólo transmite una sensación de mala conducta ante la sociedad, de irrespeto para con los demás o de desinterés por la reunió en la que estamos.
Las tocadas
El simple hecho de tocarnos el cuello indica que nos sentimos vulnerables, pues justamente esa es el área que solemos proteger primero cuando percibimos un peligro inminente. Así mismo, jugar con el cabello o acomodar el primer botón de la camisa son pequeñas expresiones que demuestran inseguridad e indican que tenemos temor y ganas de resguardarnos.
Los ojos
El lenguaje corporal es tan inmensamente poderoso que con una simple expresión podemos transmitir mucho más de lo que podemos decir con nuestras bocas y, en este caso, la mirada juega un papel muy importante. De hecho, mirar hacia arriba o girar los ojos cuando alguien se dirige a nosotros es una muy buena forma de enviar señales negativas, pues estos gestos generalmente se interpretan como desinterés, aburrimiento, cansancio o repugnancia.
El reloj
Seguramente se han topado con alguien que mire el reloj a cada 5 segundos y que lo haga con tal rapidez que a veces ni siquiera se fija en la hora. Resulta, que hacer esto durante una conversación le hace entender a las demás personas que estamos apurados, que no nos interesa la charla o que tenemos algo más importante que hacer, lo que obviamente incomodará y desconcertará a quien esté frente a nosotros en ese momento.
El balanceo
¿Han notado que muchas personas se mecen mientras hablan? Pues entérense que esto es totalmente inapropiado y que no es correcto cambiar el peso corporal de un pie a otro durante una conversación, ya que aseguran los especialistas que ese gesto suele demostrar inconformidad física y debilidad mental, así como apuro por abandonar la conversación.
