Siete hombres fuertemente armados asaltaron este viernes al mediodía a unos 300 bañistas que disfrutaban de un día de sol en playa Arapito, situada a unos 15 kilómetros de Puerto La Cruz, en los límites entre Sucre y Anzoátegui.
Los sujetos, quienes portaban fusiles R-15 (armas de guerra), llegaron a bordo de un peñero llamado “Jakera”, a eso de las 12:00 del día y comenzaron a disparar al aire.
Hombres, mujeres y niños se asustaron tanto que se escucharon gritos como sacados de una película de terror, relataron algunos testigos.
Los hampones, usando pasamontañas, le ordenaron a todas sus víctimas mantener la calma, pues de lo contrario “correría sangre”. En actitud violenta uno de los sujetos, de voz muy ronca, le exigía a los ciudadanos abrir los bolsos y entregar sus pertenencias.
Mientras el resto de los delincuentes apuntaba a los bañistas, uno de ellos revisaba decenas de carteras y bolsos de playa. Algo tembloroso, el antisocial colocaba dentro de un saco curtido los objetos de valor, entre los que se encontraban celulares y tabletas, según contó uno de los presentes.
También robaron dinero en efectivo, cuya cifra no fue precisada, y hasta los documentos de propiedad de los vehículos. Incluso, un testigo comentó que se llevaron un perrito de raza que le quitaron de las manos a una niña.
Rosa Acosta, una comerciante quien lleva más de 10 años laborando en el balneario, fue testigo presencial del suceso. Aún estupefacta por lo vivido, manifestó que los dueños de los kioscos llamaban a la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) para pedir auxilio, pero supuestamente nunca llegaron.
“Los choros actuaron a sus anchas”, afirmó Acosta en tono de molestia. Añadió que los asaltantes estuvieron una hora en el área y ninguna autoridad se presentó para ayudarlos.
A la 1:00 pm la situación aún no terminaba. El peñero en el que llegaron los ladrones no encendía y eso avivó los nervios de los ladrones. El grupo delictivo sometió a un pescador conocido cariñosamente como Cheo, lo despojaron de su embarcación “Cinco Hermanos” y luego huyeron a altamar.
Los temporadistas también se marcharon en estampida, aterrorizados. Mientras que los lugareños, afectados por lo ocurrido, decidieron cerrar la troncal 9 para exigir seguridad.
Troncos, cauchos y hasta cachivaches fueron colocados en la vía nacional. Los vecinos hicieron una cadena humana para evitar el paso vehicular.
“El cuquín’ es el responsable”, decían a viva voz algunos moradores. Según los residentes, este es el nombre del integrante una banda de piratas de mar que presuntamente viven en playa Colorada y mantienen azotada a la población.
El habitante Róger Acosta aseveró que en la zona hay sujetos que se dedica al robo de peñeros y yates en Arapo. “Los hemos denunciado ante las autoridades y nada”.
A la protesta se presentaron efectivos de la Policía de Sucre y la Guardia Nacional, quienes mediaron con los ciudadanos.
Sobre el caso se pronunció Gabriel Laclé, presidente de la Cámara de Turismo de Anzoátegui, quien afirmó que esta situación es una muestra más de que los planes de seguridad no funcionan.
Dijo que le parece insólito que a plena luz del día y en una zona tan concurrida no haya habido ninguna autoridad para resguardara a los visitantes.
Indicó que, de acuerdo con reportes, los antisociales utilizan peñeros con motores 45 o 75, muy rápidos, para cometer los atracos. “Había escuchado que abordan los yates, cuan piratas, pero no había conocido de robos como el de hoy (ayer)”.
Al parecer, también asaltan a personas que salen de Plaza Mayor, en un día de tour