Tal y como fue advertido por los abogados defensores de los nueve jóvenes detenidos el pasado 12 de septiembre, por caso Saime, ayer no se celebró la audiencia preliminar, que semanas atrás había pospuesto el Tribunal 4º de Control.
Así lo informó el abogado Pedro Troconis, también del Foro Penal, quien manifestó que ante esta “irregularidad y falta de respeto”, han presentado una acción de amparo contra la juez en cuestión, puesto que ellos solicitaron con anterioridad la sustitución de medida por presumir que esto podría ocurrir; tampoco se obtuvo respuesta.
También expusieron una acción ante la oficina del alguacilado del Circuito Judicial Penal de Lara, por tanto le corresponde a la corte de apelaciones dar respuesta en 96 horas, según señaló el abogado.
“Fue una irresponsabilidad fijar la audiencia para hoy (ayer)”, comentó Troconis, quien explicó que si bien es cierto que el Código Orgánico Penal expresa que la justicia no se paraliza por vacaciones colectivas o recesos, es bien sabido que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) les otorga un descanso navideño por estas fechas.
“Se materializó la burla”, comentó.
Troconis no descartó la posibilidad de que en los próximos días acudan de nuevo a la Defensoría del Pueblo, puesto que la juez tampoco dio respuesta a la solicitud de información hecha por dicho despacho, a petición de la parte defensora.
Refirió que este día no obtuvieron explicación alguna, sino que simplemente la jueza no se encontraba presente.
Actualmente los jóvenes no tienen nueva fecha de celebración de audiencia. Deberán esperar hasta el lunes 5 de enero cuando se reactiven las actividades.
Es de destacar que los ocho varones se encuentran detenidos en la Comandancia Policial y la dama en la policía de Los Cerrajones.
Calles cerradas
Los jóvenes no fueron trasladados. No obstante, sus familiares, esperanzados porque la audiencia se celebrara, hicieron acto de presencia a las afueras del Edifico Nacional.
Un numeroso grupo de efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, se apersonó en el lugar y cerró las calles adyacentes. Troconis calificó esto como una acción de intimidación.
