Desolado y sin colas lució ayer el centro, y otros puntos de la ciudad, muestra de que este 25 de diciembre, Barquisimeto despertó tarde.
Al realizar un recorrido por algunos punto de la urbe, se pudo constatar que el comercio, ni expendios de comida, como los tradicionales vendedores de “pastelito” de la carrera 24, laboraron; a diferencia de años anteriores.
Pocas personas transitaban por la avenida 20, algunas de ellas en dirección a las paradas de Transbarca, única opción de transporte que laboró desde las 7:00 de la mañana, hasta las 7:00 de la noche.
Tras varias semanas de multitudinarias colas y caos, la popular avenida Comercio se encontraba despejada de punta a punta, y sólo algunos conductores usaron las vías especiales del transporte público para hacer más corto su trayecto.
Padres como Ranzet Torrealba, también vecino de la zona, aprovecharon que no había flujo vehicular, para llevar a sus hijos a la avenida 20 y enseñarle allí a manejar la bicicleta que recibieron del Niño Dios. Sin embargo, la ciudadanía extrañó la presencia de los más pequeños en la calle.
Comercio cerrado
Sólo algunas farmacias de turno y panaderías abrieron sus puertas al público, puesto que los expendios de comida y restaurantes, que también ofrecen licor, prefirieron mantener sus santamarías abajo, por motivo de Ley Seca.
En el centro de la ciudad, sólo se apreció movimiento en la plaza San José, donde los “pesebreros”, como Enrique Petit, y otros artesanos, recogían la mercancía que no vendieron esta época.
Comentaron que el 24 de diciembre, hubo menos venta de la esperada y que trabajaron hasta las 7:30 de la noche. Allí dejaron la mercancía y pagaron a una persona para que la vigilara. Después de las fiestas de Noche Buena, regresaron ayer para empacar sus productos, hasta diciembre de 2015.
A diferencia de los últimos meses, no se apreciaron largas colas para comprar productos de primera necesidad, puesto que las tiendas estaban cerradas.
La Policia Nacional Bolivariana, patrullaba algunos sectores, mientras personas ebrias, deambulaban por la zona.
Parques cerrados
Según padres como Pablo Rico, el 25 de diciembre es un día para el disfrute de los niños, que contentos con el nacimiento del Niño Dios y sus juguetes, desean compartir y disfrutar.
Ayer, salió de su casa en Tamaca a las 8:00 de la mañana, para disfrutar de las instalaciones del Parque Zoológico y Botánico Bararida, pero este estaba cerrado. Un cartel dispuesto en la taquilla, informaba que no trabajarían los días 24, 25, 31 de diciembre y 1º de Enero, por fiestas navideñas.
Desconsolado, Rico comentó que regresaría con sus dos hijos a casa y que este día el “rapidito” o transporte le había cobrado Bs. 30, por el supuesto aguinaldo.
Freddy Carmona calificó dicha medida como “absurda”, puesto que adultos y niños sólo desean esparcimiento y compartir para este día.
Familias de El Tostao y El Garabatal, también se encontraron con la mala noticia.
Es de destacar que los parques Mundo de Los Niños y Bosque Macuto, también estuvieron cerrados.
Cabudare a media máquina
A pesar que algunas tiendas no laboraron ayer, el comercio informal de verduras y hortalizas se apostó en el centro de Cabudare, para ofertar sus productos. Las personas comentaron que buscaban estas para la sopa del día.
Es de destacar que espacios para la recreación como La Ceiba, también estaban desolados y sin niños.
Vale mencionar, que a diferencia del centro barquisimetano, el de Cabudare, mostró mayor desorganización y basuras.
Leida Pineda, habitante de Palavecino, señaló que en similar estado suelen dejar los comerciantes ambulante algunos sectores del municipio.
Esperan que hoy sea atendida esta problemática. De no ser así, deberán esperar hasta el lunes 29, manifestó.
Rosmir Sivira
Foto: Anner Herrera