El Ministerio Público logró que se le impusiera plantar 800 árboles a José Benedicto Guerrero Ramírez, quien admitió haber causado un daño ecológico con una maquinaria pesada el 09 de marzo de este año en la zona protectora del río Quebradón, municipio Tulio Febres Cordero del estado Mérida.
En la audiencia preliminar, el fiscal 23º auxiliar de esa región andina con competencia en materia de defensa ambiental, Orlando Rondón, ratificó la acusación contra Guerrero Ramírez por la presunta comisión de los delitos de ocupación ilícita en áreas naturales protegidas, aprovechamiento de especies del patrimonio forestal y contravención de planes de ordenación del territorio, previstos en la Ley Penal del Ambiente.
Ante la admisión de los hechos, el Tribunal 6º de Control de la referida jurisdicción acordó la suspensión condicional del proceso e impuso al hombre la ejecución de un plan de repoblamiento forestal de 800 árboles, entre cedro y otras especies, bajo la supervisión técnica del Ministerio del Poder Popular para Ecosocialismo, Hábitat y Vivienda.
También, deberá asistir a dos charlas ambientales en la sede regional del aludido ministerio.
El 09 de marzo de este año, el Ministerio Público recibió un procedimiento de la Guardia Nacional Bolivariana, tras la intervención de la zona protectora del río Quebradón, municipio Tulio Febres Cordero, donde Guerrero Ramírez, a través de una maquinaria pesada, abrió una vía de penetración agrícola sin la permisología legal.