Agradecido con Dios y con los funcionarios del Grupo Antiextorsión y Secuestro (GAES) Lara se mostró Naudy Almao Heredia, de 49 años, un comerciante que fue secuestrado el pasado martes a eso de las 5:00 p.m., cuando se disponía a salir de una ferretería en la avenida La Mata de Cabudare.
Hoy en día el hombre está contento, feliz, satisfecho de compartir nuevamente con su familia, luego de que la noche del sábado una comisión de 12 funcionarios lograra rescatarlo en el sector Los Cerrajones de Barquisimeto, donde permanecía amordazado, con las manos amarradas y los ojos vendados.
“Realizamos una investigación técnico científica con el apoyo de la labor comunal. Posteriormente que se llevaron al señor, su esposa denunció ante nosotros, una vez que la contactan”, explicó el teniente coronel Nemisto Valero Peña, comandante del GAES Lara.
Agregó que por su liberación pedían dos millones de bolívares. “Durante los cinco días de cautiverio llamaban a diferentes horas por lo que pudimos determinar que el autor intelectual del hecho está privado de su libertad en la cárcel de San Felipe en el estado Yaracuy, conocida como La Cuarta”.
Informó que la noche del sábado arribaron a la casa donde tenían a la víctima, la cual no tenía ventanas sino sólo una puerta, por la cual entraron tipo comando. “Por eso al cuidador no le dio tiempo de tomar el arma que tenía y lo capturamos de inmediato. Quedó identificado como Juan Francisco Amaro González, de 62 años, alias “El Narco”, quien estaba solicitado por la subdelegación del Cicpc en Cabinas por homicidio desde el 22 de febrero de 1994 y se le incautó una escopeta calibre 12 milímetros”.
Al continuar con las investigaciones se fueron hasta los sectores Las Tunas y Bella Esperanza, en Agua Viva, donde aprehendieron a Johny Sira, de 24 años, conocido como El Gineo; su pareja Emilianny Sierra, de 21 años, quien aparentemente está embarazada; y a Jesús Yépez Rodríguez, de 21 años, “El Judas”, todos ellos integrantes de la banda “Los Puercos”, cuyo cabecilla está preso en Yaracuy.
Aún faltan por capturar tres personas involucradas en el caso.
Comía agua y galletas
Tres sujetos se le acercaron a Naudy Almao cuando ya estaba montado en su Terios, entre ellos una mujer. Una de las personas se alzó la franela y le mostró la pistola, lo apuntó por la ventanilla y entonces lo sometieron.
Después lo pasearon durante unos 45 minutos. “Me llevaron por la avenida Ribereña hasta el Oeste. En el transcurso hicieron llamadas y decían que me tenían. Estaban muy nerviosos”, rememora la víctima.
“Ahí fue cuando me di cuenta de que era un secuestro. En la Rotaria con calle 17 me cambiaron a otro carro hasta que me llevaron a la casa donde me tenían. Me sentaron en una silla, me amarraron por el pecho, las manos, me amordazaron y nunca me destaparon los ojos. No sabía si era de día o de noche hasta que me rescataron”.
Cuenta que todos los días le daban de comer galletas saladas con agua, “aunque a veces no comía, sólo quería irme. El cuidador hablaba mucho por el teléfono y en esos momentos pensaba en escaparme, pero hay que tener mucha cabeza fría, porque un movimiento en falso puede significar la muerte”.
Recuerda que sus dos hijos de 15 y 10 años junto al resto de su familia fueron los pilares fundamentales para luchar, para tener fe en que lo iban a rescatar, aunque nunca imaginó que fuese tan rápido.
“Tenía el dolor físico y por la angustia que, yo sabía, tenían mis allegados”.
Juan Amaro, el cuidador, le manifestaba constantemente que quería salir rápido de la situación. “Anhelaba que me soltaran porque estaba muy presionado”.
Almao dice no tener cómo agradecerle a los funcionarios. “Esto no tiene precio. Gracias a todos por devolverme junto a los míos”.
Permanece en cautiverio
Se conoció que el pasado jueves se llevaron secuestrado a un hombre del oeste de Barquisimeto, cuyo caso está llevando la unidad de secuestros del Cicpc.
Con él suman cinco los larenses raptados durante el año 2014.