El presidente Nicolás Maduro anunció el martes que como parte de los acuerdos de cooperación entre Venezuela y China, una delegación de su gobierno se encuentra en Beijing procurando fortalecer los mecanismos de financiamiento del país.
«Estamos trabajando un plan de corto y mediano plazo de grandes magnitudes, muy importantes, para garantizar el financiamiento y también el acceso a la inversión y a la tecnología en todos los campos de desarrollo’’, dijo Maduro sin dar detalles durante una reunión de trabajo con empresarios venezolanos para promover las exportaciones.
El vicepresidente económico y ministro de Finanzas, general Rodolfo Marco Torres, indicó que una comisión se encuentra en China «trabajando un conjunto de elementos muy importantes en el fortalecimiento de los mecanismos de financiamiento para el desarrollo de nuestro país’’.
Las reuniones se producen en momentos en que los precios internacionales del petróleo caen en forma sostenida, lo que se traducido hasta ahora en una merma de 35% en los ingresos de Venezuela, de acuerdo con cifras oficiales.
Venezuela tiene una alta dependencia del petróleo, el cual genera cerca de 96% de los ingresos que recibe por exportaciones. La caída de precios ocurre en momentos en que el país enfrenta una inflación galopante, que alcanzó en agosto una tasa anualizada de 63,4%, y una severa escasez de productos básicos.
Venezuela ha intensificado en los últimos ocho años sus relaciones diplomáticas y comerciales con China como parte de la estrategia del gobierno para diversificar su cartera de clientes internacionales, lo que incluye un aumento en las ventas de petróleo.
Gracias a estos vínculos Venezuela se ha convertido en uno de los mayores socios comerciales de China en América Latina y el primer país de destino de los préstamos chinos en la región.
El gobierno ha recibido en los últimos años aproximadamente 50.000 millones de dólares de China. Esos préstamos se pagan con petróleo.