A las siete de la mañana se dio la orden de huelga de hambre entre los internos del Centro Penitenciario David Viloria, conocido como Uribana. Los más de tres mil reos, con el apoyo del anexo femenino. cumplieron lo que habían prometido a fin de protestar y exigir la destitución de Julio César Pérez, director del recinto, por los supuestos maltratos que les ha ocasionado desde hace una semana, cuando inició sus funciones en el lugar.
Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana entraron para tratar de controlar la situación, pero se les escapó de las manos: los internos salieron de sus celdas y tomaron el penal, al parecer tumbaron una pared y hasta quemaron sus pertenencias en protesta.
Las mujeres privadas de libertad no dudaron en manifestarse y desde las ventanas gritaban: “No queremos a Julio, no queremos a Zuly”, en referencia a los directores del penal.
Afuera los familiares de los reos estaba preocupados. Deseosos de tener información de los suyos. “Vengo a visitarlo desde Valencia pero es triste que en cuatro meses pasó de talla 36 a 28 por la mala alimentación. No sabemos nada de ellos”.
A eso de las nueve de la mañana salieron las primeras ambulancias hacia el Hospital Antonio María Pineda, donde fueron ingresados dos jóvenes: Antonio Yember Torres, de 20 años, quien tenía una herida en el abdomen producida por un proyectil y Kelvis Paredes, de 18 años, quien estaba golpeado.
Posteriormente se publicó un comunicado con doce peticiones por parte de los internos. Exigían: “Destitución inmediata del director Julio César Pérez; atención de la fiscal nacional de Derechos fundamentales; nuestros derechos intangibles como la comunicación e información; mejoras en la alimentación; respeto al artículo 46 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela; no más maltrato físico, psicológico y moral a internos, custodios y personal administrativo; apoyo a actividades deportivas culturales; respeto y derecho a la visita; no más maltrato a los familiares; exigimos un pronunciamiento inmediato de la ministra en asuntos penitenciarios, Iris Varela, que responda si apoya al violador de derechos humanos Julio César Pérez, pues él ratifica que actúa bajo órdenes de ella. Pedimos a todas las ONG en derechos humanos, sociedad en general todo su apoyo”.
Los custodios también han expresado sus molestias por el maltrato del director. Supuestamente, ayer en la mañana los acuartelaron y estarían esposados, por lo cual llamaron a algunos de la Comunidad Penitenciaria Fénix para prestar apoyo.
A eso de las 10:45 de la mañana, las féminas seguían protestando pero a esa hora gritaban que los efectivos del Grupo de Respuesta Inmediata (GRI) entraron al lugar y las estaban apuntando con armas de fuego. Al rato sacaron por la ventana una pancarta donde expresaban su rechazo al director, pedían justicia y que cesara el maltrato pero fue al mediodía cuando cantaron el Himno Nacional para oficializar su huelga de hambre.
Pasadas las 11:00 a.m, un grupo de voceras de los familiares pudieron ingresar al recinto penitenciario, donde sostuvieron una reunión con algunos reos y funcionarios de la GNB para buscar una solución pero el desenlace fue negativo: no quisieron más diálogo y exigían regresara el régimen abierto (como era anteriormente). En ese momento ya se había unido toda la población penal excepto los del módulo 1 de hombres, quienes fueron aislados.
En esa celda permanecen unos 300 internos, entre ellos, Raúl Emilio Baduel, Alexander Tirado, David Ramírez, entre otros. La semana pasada, a todos ellos, los habrían desnudado, los pusieron boca abajo en pleno mediodía por lo cual se quemaron y a los llamados “presos políticos”, les dieron una golpiza. Baduel resultó fracturado en dos costillas..
Los tomistas también exigieron regresaran a la dirección del penal, Orlando Escamilla y Elio Ortega, con quienes mantenían buenas relaciones.
Cerca del mediodía, los uniformados de la GNB desalojaron el área adyacente a la cárcel por un supuesto operativo especial que realizarían. Ya en la tarde, 60 funcionarios del grupo GRI entró al anexo femenino. Las habrían desnudado y las golpearon. Una tanqueta de la GNB esperaba en las afueras del penal para tratar de controlar la situación.
Siguieron ejemplo de El Rodeo
Desde Uribana siguieron el ejemplo que los internos de El Rodeo III dieron y se alzaron. Ya es el segundo penal que cuenta con el régimen penitenciario nuevo que en menos de una semana causa situaciones inesperadas.
Cabe destacar, hace unos meses, en Uribana, también hubo una reyerta cuando los familiares se habrían autosecuestrado. Ocurrió un domingo de visita y supuestamente detonó una granada que ingresó uno de ellos.
Incertidumbre y caos
La tensión se mantuvo en horas de la tarde, producto de la desinformación. El silencio de las autoridades aumentó el desespero de las madres, esposas, hermanos y demás familiares que se instalaron en los espacios adyacentes al recinto, para estar al tanto del desenlace de la toma y saber en qué condiciones se encontraban los privados de libertad.
El arribo de tres tanquetas al recinto, acompañadas de un nutrido grupo de funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), generó alarma entre los presentes, que esperaban la ocupación de forma violenta, para recuperar el control de las instalaciones. Sin embargo, algunos uniformados revelaron que la ministra no había autorizado el procedimiento, razón por la cual en el estacionamiento, podían verse los vehículos de guerra.
Las voceras, que tuvieron la oportunidad de ingresar al lugar para servir como mediadoras, afirmaron que una parte quería cooperar, pero la otra insistía en el cumplimiento de sus propuestas por lo que se negaban a ceder. Se pudo conocer que en medio del malestar paralizaron las conversaciones, fue al final de la tarde cuando decidieron hablar nuevamente con los fiscales.
Durante la espera, varios momentos de terror se vivieron en las afueras del recinto. El desalojo del área encendió el ánimo de las damas que solicitaban protección para sus seres queridos, pero como decidieron quedarse, recibieron empujones y gritos, lo cual provocó la furia. Con piedras de gran tamaño atacaron a los efectivos de la GNB, estos a su vez lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar a la multitud. Dos damas fueron detenidas, por alterar el orden, además atacar a un teniente.
Los traslados voluntarios eran una posibilidad para restablecer el orden, pues varios autobuses llegaron para tal fin, uno de ellos era del Internado Judicial de Barinas. Vale destacar, que algunos reos lograron comunicarse con sus madres y les pidieron estar atentos. Se conoció que 800 personas fueron enviadas a otros penales, entre ellos Tocorón y San Juan de los Morros.
Por otro lado, los reporteros gráficos y camarógrafos que realizaban la cobertura de este hecho, fueron amenazados de muerte por efectivos de la GNB. A Edickson Durán de EL IMPULSO, Abraham Palencia, de La Prensa y Tomás Gaona de Promar Televisión les impidieron cumplir con sus funciones.
Adicionalmente, borraron todo el material de las cámaras, sustrajeron las memorias y por poco destruyen sus herramientas trabajo.
Al cierre de esta edición, la destitución de los directivos sólo era un rumor, pues la ministra Iris Varela, negó la información. También se conoció que estaban otorgando libertades a los reclusos.
Piden inmediato traslado de Baduel y Tirado
La defensa de Raúl Emilio Baduel y de Alexander Tirado consignaron ante la Dirección de Derechos Fundamentales del Ministerio Público una denuncia sobre las torturas y violaciones de DDHH de las que han sido víctimas durante su reclusión en el Centro Penitenciario Raúl Viloria, en Barquisimeto.
Los abogados Omar Mora Tosta y Theresly Malavé solicitaron la apertura inmediata de una investigación para determinar a los responsables de la agresión recibida este fin de semana por los jóvenes, presuntamente ordenada por el director del penal.
“Los muchachos fueron agredidos vilmente por un grupo especial al mando del nuevo director del penal, Julio César Pérez. Los relatos indican que fueron directamente donde estaban ellos en su condición de opositores, porque así se lo dijeron quienes los golpearon. Raúl Emilio tiene fracturadas dos costillas y el Gato de Aragua una pierna gravemente lesionada», manifestó Mora.
«Los presos intentaron intervenir para que a estos muchachos no le siguieran haciendo este acoso y fueron brutalmente reprimidos”, agregó el abogado.
El representante legal señaló que hasta el momento ninguno de los abogados de la defensa ha podido ingresar a la antigua cárcel de Uribana para constatar el estado de Baduel y Tirado.
«Solicitamos que un fiscal de Derechos Fundamentales constate la situación”.
“En este momento, nosotros no sabemos si ellos pudieran estar muertos o no», expresó Theresly Malavé. Reiteró que la petición de traslado a otro centro de procesados es urgente. Cabe recordar, Baduel y Tirado fueron detenidos el pasado mes de marzo en el estado Aragua, cuando participaban en una protesta contra el Gobierno.
Baduel es hijo del exministro de la Defensa, Raúl Isaías Baduel, quien desde su prisión en la cárcel de Ramo Verde emitió una comunicación para rechazar la agresión contra su hijo.