Una vez más, la falta de servicio eléctrico llevó a los vecinos de la urbanización Fundalara a salir a las calles y protestar.
La improvisada barrera de cajas y escombros, en plena avenida Caroní, la cual conecta con Santa Elena, tuvo como objetivo advertir a las autoridades de su angustia.
Llega la noche pero el descanso está prohibido. Las obligaciones se atrasan porque la falta de luz, obliga a demorar tareas escolares y domésticas hasta que Corpoelec así lo decida.