El Consejo de Honor de la Federación Venezolana de Fútbol anunció que tras los hechos de violencia suscitados en el estadio José Antonio Páez de Araure, el Deportivo Lara tendrá que jugar los compromisos restantes del torneo Apertura 2014 en el estadio Metropolitano de Cabudare a puerta cerrada.
Dicha medida fue oficializada ayer de forma preventiva mientras el tren gerencial del rojinegro larense envíe el informe de lo acontecido en la sede del Portuguesa FC de la jornada 13 en los próximos cinco días hábiles. El Portuguesa FC también deberá presentar un informe detallado de la situación de carácter no competicional vivida el domingo pasado.
Además, en dicha circular, se le prohibió a ambos equipos solicitar el aforo del veinte por ciento en los desafíos de visitante para los encuentros venideros hasta nuevo aviso.
El CDH reveló que al conjunto local del partido donde se llevaron a cabo los hechos irregulares se le dictó lo siguiente (cita textual): “Medida preventiva de inhabilitación de la instalación Deportiva Estadio “José Antonio Páez” sede competitiva del Club Portuguesa F.C., de la Ciudad de Araure, Estado Portuguesa, con obligación de jugar a más de 200 kilómetros de la sede competitiva, fuera de la jurisdicción del Estado Portuguesa y más de 200 kilómetros de la sede competitiva, hasta tanto sean decididas las presentes averiguaciones”.
Además, se le solicitó en un lapso de cinco días hábiles a la Comisión de Torneos Nacionales el elemento probatorio de la notificación de la declaratoria o no de “Alto Riesgo” del encuentro entre el Portuguesa FC y Deportivo Lara.
Sin ánimos de evadir responsabilidad en lo ocurrido, el ejecutivo crepuscular viajará la semana entrante a Caracas a apelar la decisión tomada por el Consejo de Honor debido a que al Deportivo Lara no le competía resguardar a la afición presente por ser equipo visitante.