Ya los vecinos de urbanización El Trigal no saben adónde acudir. Han agotado todos los recursos para denunciar una caudalosa filtración de aguas servidas que se riega por la calle 8 y recorre gran parte del sector, llevando consigo malos olores y enfermedades.
Efigenia Sideris y Marlene Hernández, ambas voceras del consejo comunal El Trigal Abajo sector I, indicaron que desde hace más de tres meses vienen padeciendo lo que califican como un colapso de cloacas.
Destacaron que la red de aguas servidas comenzó a obstruirse hace un poco más de tres años, ocasión que la hidrológica comenzó a realizar trabajos para destapar la tubería.
Las troneras se sucedieron una tras otra, para tratar de solventar la filtración, pero la tubería se encuentra deshecha.
“A más de 30 años de construida, la tubería se desmorona como una galleta, siendo imperante la sustitución del colector principal, de lo contrario, el reemplazo por tramos es solo un pañito de agua tibia”, dijeron.
No negaron que Hidrolara atendió la dramática situación, pero imposibilitados de cambiar las tuberías, el agua sigue brotando.
Las cloacas explotaron
Hernández aseguró que hace unos cuatro meses, literalmente “las cloacas explotaron, saliendo el agua a través del asfalto, como chorros de petróleo”.
En dos sitios distintos, agregó la vocera comunal, las aguas servidas comenzaron a desparramarse hasta hoy en día.
Barrio Adentro está tapado
El módulo ambulatorio de la Misión Barrio Adentro de El Trigal, presenta semejantes características que la calle 8: su red cloacal está tapada. Voceros de la comunidad, señalaron que desde que se construyó la infraestructura funciona a medias.
“Instalamos en el módulo toda la aducción de agua blanca, los aires acondicionados y arreglamos un local para odontología, pero nos encontramos que la red cloacal está obstruida, por tanto, hacemos un llamado a los organismos del Gobierno nacional para que cooperen y así beneficiar a más de 900 personas del sector”, acotaron.