Hasta cuándo este Vía Crucis, se preguntan los adultos mayores sin una respuesta inmediata, ya que para cobrar su merecida pensión por haber entregado su vida útil a los procesos productivos del país, siguen siendo víctimas del más cruel e inhumano de los tratos para obtener lo que por ley le corresponde, pero a un precio muy elevado.
Como es del conocimiento público, cada mes las personas de la tercera edad se exponen a diferentes penurias en el intento para cobrar su pensión de vejez. Los abuelitos tienen que madrugar para optar por uno de los primeros puestos dentro de las inmensas cola. Asimismo, permanecen horas de pie, bajo un inclemente sol o por el contrario, se mojan por las sorpresivas lluvias. Además de ello, se encuentran imposibilitados para hacer sus necesidades fisiológicas en el momento que lo requieren por la ausencia de baños. Una gran cantidad de pensionados asisten incluso enfermos a las entidades bancarias por la misma necesidad de obtener el dinero para comprar sus medicinas o alimentos.
Los afectados por esta situación insisten en afirmar, que son muchas las cosas que el gobierno nacional y regional pueden hacer para solventar este “engorroso y por demás injusto proceso para obtener su pago mensualmente”.
“Algunos gobernantes piensan que con sólo traer desayunos, el primer día del pago de la pensión es suficiente. Nosotros necesitamos mucho más que eso. A nuestra edad no merecemos pasar por estas penurias cada mes. Estamos agotados de que pasen los años y no haya evolución ni mejora para los pensionados”, expresó una de las entrevistadas.
Ayer, como es costumbre una multitud se encontraba afuera de una conocida entidad bancaria, con el objetivo de cobrar su mes de pensión más un mes de aguinaldo.
Por ley, les corresponde dos meses de salario bajo ese concepto. El 15 de diciembre les otorgarán el mes de bonificación pendiente por cancelar. No obstante, los adultos mayores manifestaron que dos meses no son suficientes para cubrir sus gastos, sobre todo en la época decembrina donde la mayoría de los artículos, alimentos y medicamentos aumentan de precio.
Exigen a las autoridades competentes que reconsideren no solamente el proceso para el pago, sino el monto. Aseguran que el salario mínimo no les alcanza para satisfacer sus necesidades.
