Familiares, amigos y compañeros de la barra Huracan Rojinegro, se trasladaron al cementerio para darle el ultimo adiós a Roberto Vidoza.
El joven de apenas 22 años que perdió la vida tras la trifulca ocurrida en el estadio de Araure donde se enfrentaba Portuguesa FC y el Deportivo Lara.
Entre lagrimas, cantos, cohetes y banderas “ojinegras”, despidieron a Vidosa como seguramente habría querido, un “Eterno Barra Huracan Rojonegro”.