Pese a la providencia que obliga desde el primero de noviembre a un nuevo modelo de marcaje de precios en los productos en Venezuela con el PVJustos y un margen de ganancia del 30% sobre la estructura de costos, todavía no se observan estos indicadores en establecimientos de Barquisimeto.
La medida obliga al cumplimiento con el marcaje del Precio Máximo de Venta al Público en todos los productos, incluyendo los importados.
Una de las intenciones de esta acción del Gobierno es acabar con la especulación, en particular de vendedores, principalmente por cuenta propia, que se aprovechan de esta coyuntura de escasez, para subirle a los artículos de primera necesidad hasta el 100% de su costo real, golpeando aún más la economía de los compradores que se ven obligados a adquirirlos, en medio de esta acentuada crisis económica por la cual atraviesa el país.
Para hacer acatar esta providencia, la Superintendencia de Precios Justos desplegó en todo el país cerca de treinta mil fiscalizadores quienes se mantendrán vigilantes.
En el caso de Abastos Bicentenario Barquisimeto, se observaron etiquetas con PVJustos en el arroz Alba 9,50 y algunos licores.
Entretanto, venden a precios regulados leche líquida, harina PAN y pollo, entre otros, sólo que estos productos se agotan rápidamente y no cubren la demanda.
Lo que no se observaron en Abastos Bicentenario fueron electrodomésticos.
Un caso curioso ocurrió la tarde de este miércoles. El protagonista del episodio fue una gigantesca cola de personas frente a una tienda de calzado RS21, en el centro comercial Babilon. Al preguntarle a los ávidos compradores la razón de su permanencia en dicho lugar, respondieron que era por la venta de zapatos “baratos”. Un represente de la tienda dijo que el precio de los zapatos era al costo del Sicad I, lo cual los situaba en 650 bolívares.
