Desde la tarde-noche de este lunes, el cuerpo de un caballo yacía en la isla de la avenida intercomunal Barquisimeto-Cabudare, a escasos cien metros de la intersección semaforizada de la urbanización La Hacienda.
Hasta la tarde del martes, el cuerpo pestilente del equino, permanecía en el lugar, inflado y a punto de estallar, cuyos líquidos y gusanos pululaban.
El alcalde de Palavecino, José Barreras, indicó que el municipio cuenta con una unidad para recoger animales muertos, pero no de ese tamaño.
A las cinco de la tarde, comenzó el proceso de levantamiento del equino con una máquina retroexcavadora y un volteo.
Acotó el gerente de la ciudad, que pareciera sencillo recoger un animal de esas dimensiones pero era necesaria la protección de las personas que intervinieron en la operación, debido a la contaminación presente.
Lanzado con un propósito
El equino no fue atropellado según el Cuerpo de Tránsito de Cabudare, porque no hubo reporte de siniestro.
No obstante, Barreras señaló que “es evidente que al animal lo dejaron en el sitio con premeditación.
No lo lanzaron en el monte. Lo abandonaron en plena avenida Intercomunal por donde transitan no menos de cincuenta mil vehículos por día con la intención de sabotear dado el avance de las obras de ornato y embellecimiento. Pero seguimos trabajando”.
El cuerpo del caballo fue trasladado al Vertedero Controlado de Pavia, en el municipio Iribarren.