A lo largo de sus 52 años, la Unexpo se ha caracterizado por formar a los mejores profesionales en diferentes especialidades de la ingeniería, cuya capacitación está inspirada en la educación politécnica basada en la filosofía “aprender-haciendo”.
Cuando un bachiller está por concluir su carrera, ya cuenta con las herramientas necesarias para crear y construir las soluciones de diversos problemas, contribuyendo a mejorar la calidad de vida de la sociedad a la cual pertenece.
En este caso, una estudiante de Ingeniería Electrónica decidió hacer su trabajo de trabajo para mejorar la calidad de las luces del escenario del auditorio Raúl Azparren del Vicerrectorado Barquisimeto de la Unexpo, y así dejar su significativa huella en provecho del patrimonio cultural de esta casa de estudios, que también sufre las inclemencias del bajo presupuesto universitario.
Un significativo aporte
Stefanía Márquez es estudiante de Ingeniería Electrónica del Vicerrectorado Barquisimeto de la Unexpo. A la hora de realizar su trabajo, como asidua a espectáculos culturales, decidió dejar su aporte académico a su casa de estudios a través de la construcción de una consola de control de iluminación para el auditorio Raúl Azparren.
Con el respaldo de su tutor académico, doctor Gabriel Noriega, Márquez constató que el equipo de control de luces del auditorio está obsoleto y por falta de mantenimiento no está operando en las condiciones requeridas.
Destaca que de los 16 canales, solamente funcionan 8 correctamente, los cuales controlan tan solo 8 lámparas en el escenario.
Ante la realidad económica universitaria y por razones presupuestarias, es difícil para la Oficina Regional de Cultura del Vicerrectorado Barquisimeto de la Unexpo adquirir nuevos equipos y actualizados.
Por ello, la estudiante unexpista se propuso el objetivo académico de construir la consola de iluminación para controlar las luces del escenario del histórico auditorio.
Trabajo arduo y gratificante
Márquez se dedicó a evaluar los diseños de los circuitos de control de la consola existente. Y, posteriormente, diseñó el banco de control de secuencias. Además de realizar la comunicación entre la consola de iluminación y el banco de dimmers, a través del protocolo de comunicación DMX512.
Su creatividad y conocimientos le permitieron elaborar un programa de control de secuencias e intensidad de luces que se ejecuta por un micro controlador. Todo ello la llevó a construir la consola de control de iluminación y sincronizarla con el banco de dimmers, constatando su funcionamiento y su correspondencia con el manual de operación de la consola, redactado previamente.
La estudiante Stefanía Márquez está muy satisfecha con el resultado obtenido, aunque confiesa que el reto fue difícil. Un año duró la aventura de crear la consola que le ha dado un aspecto renovado al escenario del auditorio Raúl Azparren.
Por su parte, el doctor Víctor Medina, jefe de la Oficina Regional de Cultura del Vicerrectorado Barquisimeto manifestó su complacencia, porque es la primera vez que un estudiante unexpista elabora su trabajo de trabajo en beneficio de las instalaciones del complejo cultural.
-Con este aporte se evidencia la excelencia e importancia de la Educación Politécnica, que le permite al alumno una formación teórica y práctica en forma simultánea. Y mucho mejor cuando esos conocimientos se usan en provecho de la propia institución.
Un final feliz
El día de la presentación de su proyecto, Stefanía Márquez demostró en el auditorio, delante de todos, las maravillas lumínicas de su consola. Allí los profesores Gabriel Noriega (tutor académico), Omar Benvenuto (jurado) y Víctor Medina (tutor institucional) le otorgaron la máxima calificación por un proyecto que ya es realidad, y que se encuentra operativo en el auditorio Raúl Azparren del Vicerrectorado Barquisimeto de la Unexpo.