El doctor Craig Spencer, único caso de ébola registrado en Nueva York, ha evolucionado de una condición «grave pero estable» a «estable», según anunciaron hoy las autoridades sanitarias.
Ese cambio responde a los progresos del paciente y a su respuesta al tratamiento, indicó en un comunicado la organización que gestiona los hospitales de la Gran Manzana.
Spencer continúa aislado en el hospital Bellevue de Manhattan, donde ingresó hace nueve días tras haber regresado de trabajar con enfermos de ébola en Guinea.
Su caso es el único confirmado en Nueva York y llevó a las autoridades del estado y de la vecina Nueva Jersey a reforzar sus protocolos para evitar la expansión del virus.
Antes de comenzar a presentar los primeros síntomas, Spencer hizo vida normal en Nueva York, tomando el transporte público y visitando varios establecimientos hosteleros, lo que disparó el miedo entre parte de la población.
Después de eso, Nueva York y Nueva Jersey anunciaron que someterían a una cuarentena obligatoria a todos los profesionales sanitarios que regresen tras trabajar con enfermos de ébola en África Occidental.
La prometida y dos amigos de Spencer que estuvieron en contacto con él fueron aislados cuando se conoció su enfermedad, pero por ahora ninguno ha registrado síntomas.