Unos 80 pacientes renales habrían quedado sin atención

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Luis Eduardo Peper, periodista de gran sensibilidad social y siempre solidario con pacientes renales, deploró la información recogida por parte de un grupo de personas que padecen este tipo de enfermedad, respecto al supuesto cierre de la Unidad de Hemodiálisis que a través de un convenio funcionaba en una clínica privada al este de Barquisimeto.

Precisó que desconoce los motivos que llevaron a la toma de esta drástica decisión, “aunque se dijo extraoficialmente que fue por una posible discrepancia en el área administrativa”.

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Lamentó que se esté “condenando a muerte a 80 pacientes que necesitan este tratamiento”.

Acotó que la clínica nada tiene que ver con el hecho de haberse clausurado este servicio, porque lo único que hizo fue prestar diligentemente sus instalaciones para la atención de estos pacientes.

Precisó que son ciudadanos que requieren someterse a hemodiálisis por tratarse principalmente de pacientes del tipo positivo, es decir, que han sufrido otras enfermedades contagiosas y su atención debe ser especial, más rigurosa que los negativos.

Manifestó que algunos de estos pacientes se le acercaron sumamente preocupados, debido a este serio inconveniente que ahora los tiene buscando desesperadamente cupos en otras unidades de hemodiálisis en la capital larense, sin hasta ahora tener el éxito deseado.

Comentó que estas personas denunciaron que los dejan en las puertas de esas unidades que funcionan en la ciudad, porque sencillamente no hay capacidad para ellos.

Peper teme que si en el transcurso de dos semanas los 80 pacientes de hemodiálisis no encuentran un lugar donde los atiendan, estaría en juego cada una de sus vidas.

Expuso que estos 80 hombres y mujeres no pueden hacerse sentir públicamente en la sociedad, debido a que la enfermedad que sufren les impide llevar a cabo manifestaciones de calle, deben evitar agitarse, transpirar y exponerse a los rayos del sol.

En este sentido, hizo un llamado a quienes están a cargo de la unidad de nefrología del Hospital Central Universitario Dr. Antonio María Pineda para que por favor estudien implementar algunos cambios en dicho servicio para incorporar a estas 80 personas que quedaron en la calle.

Puntualizó que médicos y enfermeras del área de nefrología de esta espacialidad se enteraron del caso y no elevan un llamado a las autoridades para que procedan.

 

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